Un responsable del principal hospital de Peshawar indicó que en el atentado habían muerto 49 personas, entre las que figuran siete niños. Ningún grupo terrorista ha reivindicado de momento el atentado, pero el ministro del Interior, Rehman Malik, declaró que "todos los caminos conducen a Waziristán Sur", feudo de las milicias talibán paquistaníes, en el noroeste del país.
"Una cosa está clara, estos asesinos a sueldo a quienes llamamos talibán van a ser tratados aún con más severidad", declaró ante la prensa en Islamabad. "Creemos que no nos queda otra opción que lanzar una operación en Waziristán Sur", añadió, sin precisar cuándo se llevaría a cabo la ofensiva.
La explosión se produjo al paso de un autobús por una zona comercial próxima al Bazar Khyber, el principal de la ciudad. "La bomba había sido colocada en un automóvil aparcado en el mercado", declaró a la prensa el ministro de Información de la provincia de Frontera Noroeste, Mian Iftikhar Hussain. De momento se desconoce si se trató de una bomba por control remoto o un atentado suicida, precisó.