El ex tesorero del PP, Luis Bárcenas, que tuvo que dejar este cargo tras ser imputado en el caso Gürtel mantiene, sin embargo, su despacho, su secretaria y su asiento en el Senado. Pero además, el único de los cargos del PP imputados al que la formación le paga los costes de su defensa..
De hecho, el abogado que defiende a Bárcenas es uno de los penalistas más prestigiosos de Madrid. Miguel Bajo, según fuentes jurídicas, cobra más de 300 euros la hora y sus provisiones de fondos para uno caso como este en el que hay una imputación ante el Tribunal Supremo oscila entre 25.000 y los 30.000 euros.
Esta situación contrasta con lo que ocurre con el resto de imputados del PP en este caso. Los implicados en la trama en Madrid entre los que hay diputados regionales y ex alcaldes se pagan ellos mismos sus defensas y no el partido a pesar de que Bárcenas posee un buen patrimonio.
Lo mismo ocurre en Valencia. Tanto el presidente Francisco Camps como el que fuera secretario general del PP en Valencia, Ricardo Costa , se han pagado de sus bolsillos los abogados en el proceso de los famosos trajes.