L D (Agencias) En declaraciones a la agencia Europa Press, el portavoz parlamentario del PP, Eduardo Zaplana, ha dado un rápido repaso a lo que hay detrás de las exhibiciones de nuevo talante y regeneración democrática predicados por Zapatero. De momento, varios de los nombramientos ya realizados por el PSOE significan exactamente lo contrario.
Zaplana explica su reproche con ejemplos. El primero se refiere al hombre que sustituirá a Alberto Dezcallar al frente del CNI (Centro Nacional de Inteligencia). Será Alberto Sáiz, consejero de Industria en el Gobierno de Castilla La Mancha, un hombre de confianza de José Bono. En opinión de Zaplana, los socialistas empiezan a romper el principio de que para este cargo no se designen personas con vinculaciones partidarias: "El director del CNI –explica Zaplana– siempre había sido una persona que había reunido unas condiciones de idoneidad, desde el punto de vista de su no vinculación partidaria", aseguró y añadió que "siempre se ha buscado el mejor currículum y ahora se vuelve a romper este principio con una persona de vinculación partidaria al frente del CNI".
Pero hay más casos. El portavoz parlamentario popular también denuncia la decisión del PSOE de nombrar una directora general de Televisión Española –Carmen Caffarel– "sin haber consultado como decían que iban a consultar con todos los medios y representantes de los medios y así, sucesivamente estamos viendo que el predicamento de una campaña tiene poco que ver luego con la acción directa de Gobierno". Añadió que "no contento con eso, también, con fecha aplazada, ha cesado a responsables de instituciones fundamentales para el funcionamiento de un país como puede ser el Defensor del Pueblo, el presidente del Consejo de Estado u otras" para las que se requiere que, al menos, hasta que se produzca su relevo, "tengan el respeto y la fortaleza necesaria".
"Llenarse la boca de nuevo talante"
Según Zaplana "lo que están haciendo José Luis Rodríguez Zapatero y el PSOE es predicar justo con lo contrario de lo que están haciendo". En este sentido, explicó que "por una parte" a los socialistas "se les llena la boca de nuevo talante, diálogo y generosidad y por otra, esta es la hora bendita hora en que todavía hemos tenido ni un contacto formal para ver cómo se van a componer las comisiones en esta casa".
El portavoz popular recordó que con los gobiernos del PP, los socialistas "siempre habían tenido todo tipo de facilidades por nuestra parte y desde luego, muy generosas, porque, con mayoría absoluta, permitimos una representación de presidencias de mesas al PSOE como nunca había tenido la oposición, al menos, desde la mayoría absoluta".
En cuanto a los nombramientos del futuro gobierno, el portavoz del Grupo Popular en el Congreso precisó que Zapatero, "mucho antes de ser investido, incluso antes de las consultas al Rey nos contó el Gobierno con todo lujo de detalle, llegando incluso a los niveles más bajos de la Administración".
Así, según Zaplana "el necesario carácter de imparcialidad" de determinados cargos queda "tremendamente en entredicho". En su opinión, para el PSOE "el pluralismo consiste en que todos los socios y todos los pactos que ha hecho se dediquen a tirarle piedras al PP. En eso consiste el pluralismo, no consiste en el diálogo con todos, ni en el respeto a todos", sino que consiste, añadió, en que "yo y los que han acordado conmigo vamos a ver cómo podemos masacrar al otro".