Menú
RETENCIÓN DE DATOS - LSSICE

EXCLUSIVA: El Gobierno reconoce la presencia española en ILETS

El pasado 10 de abril de 2002, José Luis Centella, diputado de Izquierda Unida en el Congreso, presentó una pregunta parlamentaria al Gobierno sobre ILETS y la participación española en este “seminario”. En su pregunta, Centella afirmaba que, “según diversos informes del Parlamento Europeo, España participa desde 1993 en reuniones internacionales de seguridad de las telecomunicaciones denominadas ILETS” y se mostraba extrañado porque “el Congreso de los Diputados, hasta el momento, no ha tenido conocimiento alguno de tales encuentros”.

L D (Nacho García Mostazo) La respuesta del Gobierno, a la que ha tenido acceso Libertad Digital , se publicó en el Boletín Oficial de las Cortes el pasado 1 de julio. El Ejecutivo explica, restándole importancia, que “ILETS es una reunión informal en la cual participan, desde el año 1993 y por invitación, policías de los países de la Unión Europea y terceros países, y en la que se trata la problemática de la interceptación legal de los nuevos sistemas de telecomunicaciones”. En concreto, “acuden funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía especialistas en materia de telecomunicaciones e interceptación legal de las mismas”. En cuanto a la participación española sobre la que había preguntado el diputado José Luis Centella, el Gobierno matiza afirmando que “están representadas las agencias invitadas, no los distintos países”.

También afirma que, “dentro del seminario, existe un Comité Técnico Permanente (STC) y un Grupo de Trabajo de Política y Legislación (LPWG), cuyos trabajos se centran en la puesta en común de los desarrollos nacionales en el ámbito general de la interceptación de las comunicaciones, tanto desde el punto de vista de las soluciones técnicas, como en materia de legislación. Asimismo, estos grupos están en permanente comunicación con las agencias de normalización europeas ETSEI (Instituto Europeo de Normalización de las Telecomunicaciones) y estadounidense CALEA (Acta de Asistencia en Comunicaciones para las Agencias de Interceptación en Estados Unidos), donde se trata de defender posiciones en común, como puede ser la Resolución del Consejo de 17 de enero de 1995 sobre la interceptación legal de las telecomunicaciones”.

No obstante, cuando se refiere a CALEA, el Ejecutivo comete un error, ya que ese término no define a una agencia estatal norteamericana de normalización, sino a una Ley –de hecho hace una traducción literal errónea de su nombre, al confundir “Act” con “Acta”, cuando es “Ley”–. Asimismo, cuando cita a la agencia europea ETSEI, probablemente se trate de una equivocación en la transcripción, pues el acrónimo correcto es ETSI (European Telecommunications Standards Institute). Con respecto a la Resolución citada por el Gobierno, se refiere a la decisión del Consejo que adoptó el documento “IUR 1.0” elaborado por ILETS, aunque no lo cite explícitamente. Como se ha mencionado, este documento se aprobó en secreto el 17 de enero de 1995, pero no se publicó en el Diario Oficial de las Comunidades Europeas hasta pasados 22 meses, el 4 de noviembre de 1996.

El diputado José Luis Centella también preguntó si se había celebrado alguna reunión de ILETS en España, a lo que el Gobierno contesta que “en España no ha tenido lugar ninguna reunión de ILETS como tal pero, en octubre de 1998, se reunieron en Madrid, en instalaciones de la Dirección General de la Policía, los dos Grupos de Trabajo anteriormente mencionados”, lo cual viene a confirmar que en Madrid también hubo una reunión de este “seminario” policial impulsado por el FBI, aunque la reunión fuera celebrada por los dos departamentos en que se dividió ILETS para ganar en operatividad. En su respuesta, el Ejecutivo explica también que estos encuentros “constituyen una herramienta más del trabajo para la mejora de la eficacia en la función policial. Por ello, se intenta participar en todas las reuniones donde se traten temas de interés para la labor policial al efecto de estar perfectamente informados de los avances técnicos y legislativos a nivel mundial”.

José Luis Centella preguntó sobre la adaptación de las resoluciones adoptadas en ILETS a la legislación española. Aunque el Gobierno ya menciona la Resolución del Consejo de la Unión Europea del 17 de enero de 1995, más adelante amplía esta información detallando cuál es el procedimiento habitual que se sigue: “Los temas tratados se llevan al Consejo Europeo a través de los Grupos de Trabajo de Cooperación Policial, a los que pertenecen muchos de los representantes de las agencias que acuden a ILETS”. Así pues, el Ejecutivo español revela que los funcionarios de los Grupos de Trabajo de Cooperación Policial en la Unión Europea, que son quienes redactan los informes “ENFOPOL” que sirven para legislar en la UE, son los mismos empleados públicos que también acuden a las reuniones de ILETS, lo cual es especialmente importante para confirmar la relación directa del FBI y la NSA en la redacción de los documentos aprobados por las instituciones de la UE.

En cuanto a la necesidad manifestada por el diputado de Izquierda Unida para que el Gobierno mantenga informado al Parlamento sobre estas cuestiones, la respuesta del Ejecutivo es contundente: “Su celebración no está sujeta a especiales requisitos en cuanto a comunicaciones (...), ni en cuanto al suministro de información que proceda a los organismos institucionales que la demanden”. Esta opacidad informativa, lógica al tratarse de reuniones de coordinación entre agencias policiales, se vuelve a poner de manifiesto al final de la respuesta parlamentaria, porque de todas las preguntas formuladas por el diputado de IU, el Gobierno sólo deja una sin contestar: ¿Quién organiza estos encuentros? El Ejecutivo sí explica que los funcionarios policiales acuden a ILETS “por invitación” y en compañía de sus homólogos de otros Estados de la Unión Europea y de “terceros países”, pero no especifica de qué países y, sobre todo, no dice que la idea para crear ILETS partió de Estados Unidos, la nación responsable de la mayor red global de interceptación de las comunicaciones.

Sin embargo, gracias al Parlamento Europeo y a las investigaciones llevadas a cabo por la organización británica de defensa de las libertades civiles “Statewatch”, podemos saber que ILETS fue una idea del FBI en colaboración con la NSA, aunque es posible que ese dato no tuviera demasiada relevancia para el Gobierno español, aunque también podríamos pensar que prefirió ocultarlo por algún motivo concreto. Lo cierto es que, después de reconocer su participación en ILETS, esa es la única cuestión que la Administración española deja en el aire.

En Tecnociencia

    0
    comentarios