(Libertad Digital) Julen de Madariaga y Aguirre nació en Bilbao el 11 de octubre de 1932. Fundó ETA en 1959 y participó en su I Asamblea de la banda en 1962, al formar parte de su Comité Ejecutivo. Antes de la muerte de Franco, residió en Francia, Inglaterra, Argelia y Chile, lugares desde los que colaboró activamente con la organización terrorista, con acciones como la huelga de hambre en la catedral de Bayona.
De nuevo en España tras la instauración de la democracia, fue uno de los creadores de Herri Batasuna, el brazo político de ETA, en 1978. Durante estos años, fue defensor de la "línea dura" de la banda terrorista. Madariaga fue imputado por delitos como asociación de malhechores y colaboración con ETA, o fabricación de imanes para fabricar bombas. Por estos hechos, permaneció en prisión en Francia durante tres años, tras los cuales abandonó el país galo en 1991y regresó a España. Fijó su residencia en Bilbao, donde comenzó a ejercer la abogacía.
En marzo de 2001 se sumó a Aralar, surgida dentro del entorno proetarra e integrada por actuales y antiguos cargos de HB. Este colectivo, que se presentó a las elecciones municipales de 2003, estaba encabezado Patxi Zabaleta e Iñaki Aldekoa, y su única diferencia respecto a Batasuna era su condena a los atentados de ETA. La formación defiende, sin embargo, el derecho de autodeterminación.
En el congreso constituyente del nuevo partido, celebrado el 22 de junio de 2002, Madariaga fue nombrado reponsable de la comisión de garantías. Además, fue el candidato de Aralar a Diputado General de Vizcaya en las elecciones locales del 25 de mayo de 2003. Actualmente forma parte del Comité Ejecutivo del partido. En estos últimos años, ha participado en varios documentales y entrevistado en diversos medios de comunicación como fundador y ex integrante de ETA, hasta su detención este martes.
En abril de este año, un mes después de la entrada en vigor del alto el fuego permanente declarado por ETA, Julen Madariaga concedió una entrevista a un periódico francés, en la que se preguntaba cómo "podrá ETA resistir a la presión financiera sin recurrir a lo que comúnmente se denomina el 'impuesto revolucionario'".
Otros "veteranos" de ETA detenidos este martes
Ángel María Iturbe Abásolo. "Ikula": nació en 1953 en Mondragón y es hermano del que fue máximo dirigente de la organización terrorista, el fallecido Domingo Iturbe, "Txomin". Se le imputa la participación en varios atentados mortales: el ametrallamiento de sendas patrullas de la Policía y la Guardia Civil en 1977 y 1978, con el resultado de cinco asesinatos. Gozaba del estatuto de refugiado en el país vecino, con lo que se libró varias veces de la cárcel hasta que fue deportado a Argelia, donde participó en 1988 en las conversaciones de Argel. Tras su fracaso, fue de nuevo deportado a la República Dominicana. Allí permaneció hasta la tregua de 1998, año en que regresó a Francia junto con su pareja.
Ramón Sagarzazu: nació en Irún en 1936. Huyó de la Justicia española en 1994 tras dedicarse durante varios años a coordinar el paso de etarras y materiales por la frontera con Francia. En 1996 comenzó a colaborar con el entramado internacional de ETA y permaneció en Venezuela hasta 2002, hasta que fue detenido en Venezuela con documentación falsa. Tres años más tarde, asumió la máxima responsabilidad de las actividades internacionales de la banda por la detención del anterior encargado, Pedro Esquisabel, "Serpa". Sagarzazu Gaztelumendi tiene vigente una reclamación judicial de la Audiencia Nacional.
Eloy Uriarte Díaz de Gereño, el "Señor Robles": fue imputado por un delito de integración en organización terrorista por el juez Garzón, en un auto hecho público el 21 de noviembre de 2002. Fue detenido el 11 de julio de 1989 en Bayona, cuando era considerado el "tesorero" de la banda terrorista ETA. Fue sustituido como responsable del aparato de fianzas por Sabino Euba "Pelo Pincho". Durante muchos años el "Señor Robles" fue muy conocido por los empresarios vascos que pagaban el impuesto revolucionario a ETA. Algunos de estos empresarios han relatado años más tarde que Uriarte les esperaba sentado en una mesa de un bar donde, el día señalado por la banda, debían ir pasando delante de él entregándole la cantidad exigida.
