L D (EFE) El entrenador de los Grizzlies, Mike Fratello, puso como titular a Gasol y el jugador español de inmediato mostró que no estaba en su mejor momento de forma y que la inactividad le había afectado. Pero Gasol, al minuto de haber comenzado el partido, ya tenía su primer rebote defensivo de la noche y el haber cumplido el objetivo de superar la grave lesión que sufrió durante la semifinal del Campeonato del Mundo de Japón frente a Argentina.
Sin Gasol en su mejor forma, aunque lo intentaba, el resto del equipo tampoco funcionó como le hubiese gustado a Fratello y de inmediato los Hawks se pusieron por delante en el marcador con doble dígito y ya no perdieron la ventaja durante el resto del encuentro. El propio Gasol, de 26 años, reconoció al concluir el partido y ser el centro de atención de todos los periodistas que no había estado "fino" en sus acciones, algo que consideró lógico por el tiempo de ausencia fuera de la competición: "No he tenido la confianza normal en mi juego, no he atacado con fuerza bajo los aros, ni en las penetraciones o tiros a canasta, pero a la vez el hecho de haberme sentido bien en cuanto la lesión en el pie izquierdo es mi gran triunfo esta noche".
El jugador catalán dijo que había que ser consciente de que no sólo había perdido 22 partidos de liga sino que además tampoco pudo hacer la pretemporada, que es fundamental para cualquier profesional de la NBA. "Es duro volver a la competición y como es lógico estoy un poco más lento que lo normal porque las piernas te pesan y no las puedes mover como te gustaría", explicó Gasol. "Todo esto forma parte de la vuelta a la acción de cualquier jugador que ha necesitado un largo periodo para recuperarse".
Los jugadores de los Hawks también fueron unánimes en reconocer que Gasol no era el mismo jugador que la pasada liga fue seleccionado para el Partido de las Estrellas, pero que era algo lógico y normal. No es el mismo de la pasada temporada", declaró el pívot georgiano Zaza Pachulia, que fue el máximo encestador de los Hawks y del partido con 22 puntos. "Pau no ha jugado en la NBA en nueve meses y tampoco pienso que estuviese al ciento por ciento y de ahí que pudiese aprovecharme tanto en el ataque como en defensa".
Sin embargo, Gasol dijo sentirse "feliz" por haber superado todo el proceso de rehabilitación de la lesión y ahora tener la oportunidad de estar en el campo para ayudar a su equipo. Es muy frustrante el ver como el equipo necesita de tu ayuda y no puedes ayudarle de ninguna manera", valoró Gasol lo que han sido los 22 partidos que no pudo disputar con una marca perdedora de 5-17 para los Grizzlies.
La derrota ante los Hawks de Atlanta fue la quinta consecutiva para los Grizzlies que tienen marca de 5-18 y es la peor de la liga, algo que Gasol quiere cambiar de cara a los próximos partidos. Estoy listo para comenzar a dar mayor aportación al equipo y ayudarle a encontrar el camino del triunfo que teníamos la pasada temporada", agregó Gasol. Es el mismo objetivo que tiene el entrenador Fratello, quien se ha mostrado frustrado con el juego que hizo su equipo ante los Hawks al faltarle consistencia y solidez. "No puedo explicar porque no podemos mantener el mismo nivel de juego cada noche", comentaba Fratello. "Creo que es algo mental más que físico".
Fratello, al valorar el trabajo de Gasol, dijo que había sido el "esperado" para un jugador que ha estado fuera de la competición por tres meses. "Pau volverá a ser el gran jugador de la pasada temporada en los próximos partidos". Los Grizzlies no tendrán demasiado tiempo para descansar y recuperar fuerzas físicas y mentales porque viajan a Miami para enfrentarse el sábado al equipo local de los Heat. Será un otro partido diferente y espero que mi aportación al equipo vaya a más a medida que tengo más minutos de acción en el campo", agregó Gasol.