L D (EFE) El documento, elaborada por Francia, Rusia, España, Reino Unido y EEUU, que integran el Grupo de Amigos del Sáhara, también quiere romper el actual estancamiento a la búsqueda de una solución a la disputa que data de 1975 sobre la ex colonia española.
En la resolución adoptada, se insta a Marruecos y al movimiento independentista saharaui, Frente Polisario, a entrar en negociaciones "sin condiciones previas y en buena fe, tomando en consideración los acontecimientos de los últimos meses, con vistas a encontrar una solución política justa, duradera y aceptable mutuamente, que proporcione la autodeterminación al pueblo saharaui".
Con este propósito, se solicita al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que cree las condiciones para estas negociaciones bajo sus auspicios, así como que invite a los Estados miembros a brindar la asistencia apropiada durante dichas conversaciones. Al respecto, Ban deberá presentar un informe a más tardar el próximo 30 de junio en el que de cuenta del estatus y los avances en las negociaciones, así como de sus gestiones.
En la misma resolución, el Consejo también autorizó una prorroga hasta el 31 de octubre próximo de la MINURSO, cuyo mandato termina este lunes, que cuenta con poco más de 200 efectivos. La MINURSO, que se desplegó en abril de 1991, vigila los acuerdos militares sobre el alto al fuego alcanzado por las partes y respalda la búsqueda de una solución pacífica al conflicto.
Como acontecimientos "positivos", en el preámbulo de la resolución se menciona el plan de autonomía que presentó Marruecos el pasado 11 de abril, iniciativa que ha sido calificada por los miembros del Consejo como "un esfuerzo serio y creíble para avanzar en el proceso hacia una solución" del litigio territorial, pese a que niega cualquier posibilidad de autodeterminación y está enfocado a blindar la soberanía marroquí sobre el Sáhara.
Asimismo, se toma nota de la propuesta presentada por el Frente Polisario un día antes, en la que se exige la convocatoria de un referéndum de autodeterminación en el que una de las opciones sea la independencia.
Por primera vez, en la resolución no hace referencias específicas a otras resoluciones previas adoptadas sobre la cuestión del Sáhara Occidental que reflejaban las propuestas de paz presentadas por la ONU, la elaborada por el anterior enviado especial, el ex secretario de Estado estadounidense, James Baker.
Tanto Marruecos como el Polisario ya han expresado públicamente su disposición de iniciar negociaciones directas para hallar una salida al conflicto del Sáhara Occidental y a cumplir con las recomendaciones del Consejo de Seguridad.
En la resolución adoptada, se insta a Marruecos y al movimiento independentista saharaui, Frente Polisario, a entrar en negociaciones "sin condiciones previas y en buena fe, tomando en consideración los acontecimientos de los últimos meses, con vistas a encontrar una solución política justa, duradera y aceptable mutuamente, que proporcione la autodeterminación al pueblo saharaui".
Con este propósito, se solicita al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que cree las condiciones para estas negociaciones bajo sus auspicios, así como que invite a los Estados miembros a brindar la asistencia apropiada durante dichas conversaciones. Al respecto, Ban deberá presentar un informe a más tardar el próximo 30 de junio en el que de cuenta del estatus y los avances en las negociaciones, así como de sus gestiones.
En la misma resolución, el Consejo también autorizó una prorroga hasta el 31 de octubre próximo de la MINURSO, cuyo mandato termina este lunes, que cuenta con poco más de 200 efectivos. La MINURSO, que se desplegó en abril de 1991, vigila los acuerdos militares sobre el alto al fuego alcanzado por las partes y respalda la búsqueda de una solución pacífica al conflicto.
Como acontecimientos "positivos", en el preámbulo de la resolución se menciona el plan de autonomía que presentó Marruecos el pasado 11 de abril, iniciativa que ha sido calificada por los miembros del Consejo como "un esfuerzo serio y creíble para avanzar en el proceso hacia una solución" del litigio territorial, pese a que niega cualquier posibilidad de autodeterminación y está enfocado a blindar la soberanía marroquí sobre el Sáhara.
Asimismo, se toma nota de la propuesta presentada por el Frente Polisario un día antes, en la que se exige la convocatoria de un referéndum de autodeterminación en el que una de las opciones sea la independencia.
Por primera vez, en la resolución no hace referencias específicas a otras resoluciones previas adoptadas sobre la cuestión del Sáhara Occidental que reflejaban las propuestas de paz presentadas por la ONU, la elaborada por el anterior enviado especial, el ex secretario de Estado estadounidense, James Baker.
Tanto Marruecos como el Polisario ya han expresado públicamente su disposición de iniciar negociaciones directas para hallar una salida al conflicto del Sáhara Occidental y a cumplir con las recomendaciones del Consejo de Seguridad.