(Libertad Digital) En abril de 1989 el ayuntamiento de Sevilla, gobernado por el socialista Manuel del Valle, envió una consulta previa a la familia Villar Ortiz por la que les informaban de que en la parcela de Luis Montoto, 9, de su propiedad, no se podían construir pisos. El argumento de Urbanismo fue que la parcela estaba recatalogada según el Plan General de 1987 y que la ley les impedía cambiar su calificación para construir allí varios pisos.
En la parcela se asentaba un chalet heredado por cinco hermanos y su madre, tras la muerte de su padre. "Quisimos hacer pisos para nosotros; para nuestros hijos. Pero no nos dejaron porque la casa estaba catalogada. No podíamos construir ni siquiera en el patio interior", ha declarado a El Mundo uno de los hermanos. Otro precisa que "además nos indicaron quie la teníamos que vender como lo que era, como una casa unifamiliar".
Y así fue como la vendieron al Partido Socialista. Siete años después lo que resultaba imposible para la familia Villar Ortiz pasó a ser realidad para el nuevo dueño, el PSOE. El nuevo Plan General, aprobado en 2006, autorizó al PSOE construir un bloque de pisos de 6 alturas.
La recalificación causó en su momento un gran escándalo, y tanto el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, como el concejal de Urbanismo Emilio Carrillo, salieron al paso diciendo que la situación en realidad no había cambiado y que siempre se pudo construir un bloque de seis pisos. Carrillo ha declarado recientemente que "Alejandro Rojas Marcos o Soledad Becerril", que fueron alcaldes con el PA y el PP respectivamente, "tendrían que haber concedido al PSOE esta misma licencia de obras".