LD (EFE) Toda la facturación de equipajes quedó suspendida hoy en la Terminal 5 del aeropuerto londinense de Heathrow, gestionado por BAA (filial del grupo español Ferrovial), después de que las cancelaciones de vuelos y las demoras en la entrega de equipajes ensombreciesen su primer día de funcionamiento.
British Airways (BA), la única aerolínea que acoge la terminal, pidió disculpas a los viajeros por los trastornos sufridos en esa terminal, que ha contado con una inversión de 4.300 millones de libras (4.494 millones de euros, al cambio actual).
La decisión de suspender la facturación debido a problemas relacionados con la tramitación del equipaje de los clientes supone que los viajeros sólo podrán volar con equipaje de mano, modificar su viaje o reclamar la devolución del dinero del billete.
La aerolínea remitió a los viajeros a un teléfono de información, 0800727800 (para llamadas desde el Reino Unido), o la página web, www.ba.com, para lograr información más actualizada.
La jornada arrancó con buen pie: el primer avión que accedió a la T5, procedente de Hong Kong, aterrizó a las 4.42 GMT, ocho minutos antes de la hora prevista, mientras que el primer vuelo que abandonó el edificio, a las 6.20 horas GMT, partió hacia París.
Sin embargo, a las cuatro horas del comienzo de las operaciones, algunos pasajeros tenían que esperar alrededor de 75 minutos para recoger sus equipajes.
Asimismo, en torno a las 14.00 horas GMT un total de 20 vuelos habían sido cancelados.
Un portavoz de BA indicó a Efe que esta cifra es mucho más alta de lo habitual, y la atribuyó a una mezcla de factores, entre ellos la necesidad del personal de familiarizarse con las instalaciones.
El representante de la aerolínea añadió que no preveía que se cancelase ningún vuelo más a lo largo de la tarde, pero, según la agencia de noticias británicas PA, el número de vuelos cancelados asciende a 34.
El Ministerio de Transportes aseguró que esperaba que tanto British Airways como BAA "se empleen a fondo para resolver estos asuntos y limiten los trastornos a los pasajeros".
Michael Barnfield, que viajaba desde Miami con su hijo Charles, aseguró a la prensa local que estaba "furioso" tras tener que esperar dos horas para recoger su equipaje, mientras que Anja Kaut, que volaba desde Múnich con su familia tuvo una espera de una hora.
Walter Henry y su mujer, Helen, perdieron su vuelo después recibir "seis direcciones distintas de seis personas distintas" en la sala de salidas, según contaron a la agencia PA.
Antes de que los problemas ensombrecieran la apertura de la terminal, el director para Heathrow de BAA, Mark Bullock, había calificado la jornada de "apasionante" y señaló que este día es un hito para el aeropuerto.
Por su parte, el director de logística de Heathrow, Shaun Cowlan, afirmó que BAA se estaba encargando de solucionar los problemas y señaló que todos los grandes proyectos aeroportuarios tienen ciertas dificultades al comienzo.
En cuanto a British Airways, su consejero delegado, Willie Walsh, que asistió a la llegada del primer vuelo, afirmó sentirse "encantado".
"Esto es mucho mejor que el resto de Heathrow", aseguró.
Antes del mediodía, unas 250 personas se manifestaron ante la terminal en protesta por la expansión del aeropuerto.
La T5 fue inaugurada de forma oficial por la reina Isabel II el pasado 14 de marzo.
British Airways (BA), la única aerolínea que acoge la terminal, pidió disculpas a los viajeros por los trastornos sufridos en esa terminal, que ha contado con una inversión de 4.300 millones de libras (4.494 millones de euros, al cambio actual).
La decisión de suspender la facturación debido a problemas relacionados con la tramitación del equipaje de los clientes supone que los viajeros sólo podrán volar con equipaje de mano, modificar su viaje o reclamar la devolución del dinero del billete.
La aerolínea remitió a los viajeros a un teléfono de información, 0800727800 (para llamadas desde el Reino Unido), o la página web, www.ba.com, para lograr información más actualizada.
La jornada arrancó con buen pie: el primer avión que accedió a la T5, procedente de Hong Kong, aterrizó a las 4.42 GMT, ocho minutos antes de la hora prevista, mientras que el primer vuelo que abandonó el edificio, a las 6.20 horas GMT, partió hacia París.
Sin embargo, a las cuatro horas del comienzo de las operaciones, algunos pasajeros tenían que esperar alrededor de 75 minutos para recoger sus equipajes.
Asimismo, en torno a las 14.00 horas GMT un total de 20 vuelos habían sido cancelados.
Un portavoz de BA indicó a Efe que esta cifra es mucho más alta de lo habitual, y la atribuyó a una mezcla de factores, entre ellos la necesidad del personal de familiarizarse con las instalaciones.
El representante de la aerolínea añadió que no preveía que se cancelase ningún vuelo más a lo largo de la tarde, pero, según la agencia de noticias británicas PA, el número de vuelos cancelados asciende a 34.
El Ministerio de Transportes aseguró que esperaba que tanto British Airways como BAA "se empleen a fondo para resolver estos asuntos y limiten los trastornos a los pasajeros".
Michael Barnfield, que viajaba desde Miami con su hijo Charles, aseguró a la prensa local que estaba "furioso" tras tener que esperar dos horas para recoger su equipaje, mientras que Anja Kaut, que volaba desde Múnich con su familia tuvo una espera de una hora.
Walter Henry y su mujer, Helen, perdieron su vuelo después recibir "seis direcciones distintas de seis personas distintas" en la sala de salidas, según contaron a la agencia PA.
Antes de que los problemas ensombrecieran la apertura de la terminal, el director para Heathrow de BAA, Mark Bullock, había calificado la jornada de "apasionante" y señaló que este día es un hito para el aeropuerto.
Por su parte, el director de logística de Heathrow, Shaun Cowlan, afirmó que BAA se estaba encargando de solucionar los problemas y señaló que todos los grandes proyectos aeroportuarios tienen ciertas dificultades al comienzo.
En cuanto a British Airways, su consejero delegado, Willie Walsh, que asistió a la llegada del primer vuelo, afirmó sentirse "encantado".
"Esto es mucho mejor que el resto de Heathrow", aseguró.
Antes del mediodía, unas 250 personas se manifestaron ante la terminal en protesta por la expansión del aeropuerto.
La T5 fue inaugurada de forma oficial por la reina Isabel II el pasado 14 de marzo.