(Libertad Digital) En un comunicado de prensa, la Unión General de Trabajadores (UGT) denuncia que los trabajadores y visitantes del monumento a las víctimas del 11-M , situado en la estación de Atocha, tienen que soportar temperaturas cercanas a los cuarenta grados centígrados.
De acuerdo con el sector ferroviario de UGT-Madrid, las temperaturas impiden que los trabajadores tengan unas condiciones mínimas para poder realizar sus tareas. El sindicato explica que la queja ha presentado su queja ante la dirección de RENFE-Cercanías.
El comunicado menciona que ante las denuncias de UGT, RENFE-Cercanías respondió que la gestión del monumento corresponde a la Comunidad de Madrid. Por su parte, el Gobierno regional alega que en realidad lo gestiona el Ministerio de Fomento que, a su vez, dice que el mantenimiento de las instalaciones es responsabilidad de una empresa privada.