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“Hay políticos europeos que apoyan a los populistas y les venden armamento”

El escritor peruano Álvaro Vargas Llosa ha participado este jueves en la cuarta jornada del primer curso del Campus FAES titulado La tiranía de lo políticamente correcto. Ha realizado una dura crítica contra los dirigentes populistas en Latinoamérica, entre los que ha destacado a Hugo Chávez, pero también a “los políticos europeos como Zapatero” que les dan aliento político y militar.

El escritor peruano Álvaro Vargas Llosa ha participado este jueves en la cuarta jornada del primer curso del Campus FAES titulado La tiranía de lo políticamente correcto. Ha realizado una dura crítica contra los dirigentes populistas en Latinoamérica, entre los que ha destacado a Hugo Chávez, pero también a “los políticos europeos como Zapatero” que les dan aliento político y militar.
(Libertad Digital) Tras la intervención de la ex ministra de Defensa colombiana Marta Lucía Ramírez y del presidente de FAES, José María Aznar, Vargas Llosa ha felicitado la operación de liberación de Ingrid Betancourt, pero ha precisado que siente “vergüenza por el papel que han jugado algunos vecinos latinoamericanos en la lucha contra el terrorismo en la región”.
 
Coautor de El manual de perfecto idiota latinoamericano, Vargas –Llosa ha centrado su alocución en los males del populismo en la región y ha criticado los apoyos políticos y militares que recibe desde el exterior. En concreto ha señalado al Gobierno de Rodríguez Zapatero.  “No sólo intelectuales como Chomsky o Ramonet apoyan el populismo en América Latina, también políticos europeos que se prestan a la causa, como es el caso de Zapatero que vendió armamento a Hugo Chávez esgrimiendo que creaba empleo a miles de españoles”.
 
Entre los rasgos que definen al populismo, el escritor ha destacado su “imprecisión ideológica, que posiciona al líder por encima de las leyes; y la idolatría por el Estado, que le otorga la función de productor económico y de generador de empleo”, y no ven, ha añadido, “que lo único que produce esa política es déficit y altas tasas de desempleo”.
 
Vargas Llosa también ha advertido del “autoritarismo de los populistas que debilita las instituciones y da más fuerza al gobierno en detrimento del Estado de Derecho”. Ha denunciado, a su vez, el “antiimperialismo que no sólo censura las intervenciones militares de EEUU sino que le responsabiliza de la pobreza de la región”. Una teoría que se asienta en “la errónea idea de concebir a las actividades comerciales como una relación de suma cero en el que una parte sólo puede obtener beneficios si la otra pierde”.
 
Para Vargas Llosa hay una realidad irrefutable: “La globalización ha dado grandes beneficios a América Latina gracias a que le ha permitido vender sus materias primas en el mercado global”.
 
Siguiendo la línea argumental de su libro, El manual del perfecto idiota latinoamericano, Vargas Llosa ha subrayado que “el populismo es el culpable del odio en nuestra región a EEUU y del aprecio de los mandatarios a la erótica del poder frente al Estado de Derecho y a la economía de mercado”.
 
Petición a Uribe
 
El autor peruano ha alabado la figura del mandatario colombiano, al mismo tiempo que le ha hecho una petición: “Uribe se ha mostrado inasequible al desaliento y quiero que corone esta  gran labor retirándose del Gobierno al terminar este segundo mandato”. Para Vargas Llosa, “no sería bueno que llevara a cabo una reforma de la Constitución que le permitiera aspirar a gobernar un tercer mandato”.
 
Mesa redonda
 
La mesa redonda que se ha celebrado esta tarde estaba programada para  tratar la cuestión de la doble moral hacia Colombia y ha estado, como no podía ser de otra forma, muy influenciada por el rescate militar de Ingrid Betancourt y otros catorce rehenes.
 
El escritor y periodista, Plinio Apuleyo Mendoza, ha reivindicado la lucha contra el narcotráfico en Colombia y ha solicitado “la colaboración internacional porque no es sólo una cuestión de producción sino también de demanda”. “La doble moral trata de presentar a Colombia como un país corrompido por el narcotráfico y en el que se asesinan líderes sindicales”.
 
Plinio Apuleyo ha advertido que “Colombia es un país democrático rodeado de países que no lo son y en ellos existe un populismo de ideología grave”. Dentro de ese panorama del “socialismo del siglo XXI”, el escritor y periodista ha afirmado que  “Colombia es una excepción con su separación de poderes y con libertad de expresión”.       
 
Jacques Thomet, ex director de AFP en Colombia y Venezuela, ha condenado que “esta mañana, en una radio francesa, han emitido una canción en la que se tacha a Uribe de fascista, al mismo tiempo que en el Ayuntamiento de París cuelga una pancarta con la fotografía de Ingrid Betancourt que dice ‘detenida en Colombia’”. Thomet ha criticado que “el Gobierno de Francia, tras conocer la liberación, manifestó que estaba dispuesto a recibir a terroristas de las FARC a cambio de la liberación de Betancourt”. “Trabajaré –ha continuado el francés- para que en mi país no entren autores de crímenes de lesa humanidad”.
 
El consejero de Inmigración de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, ha señalado “el buenismo de la izquierda” como la raíz del problema, pues “hoy llama paz a lo que en realidad es rendición”.  Fernández-Lasquetty ha considerado que “el apaciguamiento con el terrorismo no funciona” y que para luchar contra él, la receta es “la condena más firme y la lucha más decidida contra los que sólo buscan el poder totalitario sobre las democracias libres”.“Tengo la convicción personal de que cuando desaparezca el terrorismo Colombia pasará a ser un país desarrollado”, ha concluido.
 
 

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