Vicente Martínez-Pujalte soltó el jueves la bomba. Un diputado del PSOE y una persona muy próxima a Manuel Chaves podrían estar implicadas en el caso Gescartera. Y lo hizo, además, desde la tribuna de oradores del Congreso de los Diputados. Eso sí, en su intervención habló pero no presentó pruebas. Pujalte, ahora, se enfrenta a la obligación ética de aportar los papeles necesarios que respalden sus palabras. Eso es lo que exigen los socialistas, que amenazan con querellarse contra el diputado popular. Hasta ahí, todo normal, dentro de lo anormal que resulta el asunto Gescartera.
Lo sospechoso empieza a ser la reacción inicial de los socialistas. Su negativa el viernes por la mañana a no acudir a la comisión parlamentaria que investigará el caso Gescartera si Pujalte no rectificaba empieza a ser sospechosa. Esa actitud tiene muy poco de inteligente. Más bien es propia de quien tiene algo que esconder, y esa es la sensación que dejó Jesús Caldera al anunciar la posición de su grupo. Después, varias horas después, los socialistas dieron marcha atrás y anunciaron su participación en la comisión. Pero la imagen de que tienen algo que ocultar es difícil borrarla de la memoria, especialmente cuando no tuvieron la cintura suficiente para contestar a Pujalte que si había uno de los suyos implicado en el caso, sería cesado inmediatamente y a seguir con lo que estamos, que es con averiguar la verdad.
No se qué impresión se habrá llevado el PP de todo esto, pero yo personalmente creo que los "populares" han tanteado a los socialistas para ver por dónde pueden salir en la comisión y deben haber constatado, de entrada, que son bastante torpes y, de salida, que puede que no tengan nada serio contra ellos o contra el Gobierno, pasando porque, a lo mejor, Pujalte tiene razón y hay socialistas de peso implicados de una u otra forma con Camacho y su trama. Eso sí, tampoco descarto las sorpresas, pero por lo visto el viernes por la mañana, las probabilidades de que se produzcan son pocas si éstas no proceden de nuevas revelaciones en los periódicos o de lo que pueda salir en la Audiencia Nacional donde, hoy por hoy, todo es posible.
En España
0
comentarios
Servicios
- Radarbot
- Libro