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Antisemitas incendian un centro social de la comunidad judía en un barrio de París

Ha ocurrido en la calle Popincourt, al este de la capital francesa. Un local de la comunidad judía de unos cien metros cuadrados ha quedado destruido tras un incendio intencionado. Las paredes han aparecido pintadas, según el alcalde de París, con “frases nazis y antisemitas escandalosas”. El incendio fue controlado con rapidez y no hay que lamentar heridos. El presidente Jacques Chirac ha condenado el atentado y ha mostrado solidaridad con “toda la comunidad judía de Francia”.

L D (Agencias) Un incendio intencionado destruyó en la madrugada de este domingo un centro social judío en un barrio de París sin dejar víctimas, según indicó el Ayuntamiento de la capital francesa.
 
El fuego destruyó un centenar de metros cuadrados, de los 300 de esta sede social que en tiempos fue una sinagoga, informaron los bomberos. El siniestro quedó bajo control hacia las 02.30 GMT, sin que las llamas hubiesen alcanzado los cinco pisos superiores del inmueble, que no tuvieron que ser evacuados. Intervinieron en su extinción medio centenar de bomberos que al desaparecer el humo encontraron numerosas inscripciones antisemitas y nazis en los muros del local, que tenía, entre otras funciones, la de servir de restaurante a los fieles más desprotegidos de la comunidad.
 
El primer ministro francés, Jean-Pierre Raffarin, prometió severos castigos contra los autores de actos antisemitas: "Francia será extremadamente severa contra quienes se libren a actos antisemitas", afirmó Raffarin al visitar el centro incendiado. Raffarin permaneció media hora en el lugar de los hechos, en la planta baja de un inmueble de la calle Popincourt, donde hacía la 01.30 GMT se registró un incendio criminal que no causó víctimas, provocado probablemente con la ayuda de hidrocarburos, según fuentes policiales.

En el recinto calcinado, el jefe del Ejecutivo recordó que "los autores de tales crímenes pueden ser condenados hasta a 20 años de cárcel y la fiscalía pedirá la pena máxima" para ellos. Agregó que "el conjunto de las fuerzas del país será movilizado para que el arresto de los autores de estos crímenes sea rápido", y expresó su voluntad de que "frente a un acontecimiento de tal horror se esté movilizado". El primer ministro consideró "un insulto ver esas cruces gamadas cuando estamos celebrando la Liberación de nuestro país" de los nazis, el 25 de agosto de 1944.
 
En un comunicado, el alcalde de París, el socialista Bertrand Delanoe, expresó su "consternación y su horror" y consideró intolerables "las inscripciones nazis y antisemitas escandalosas que ensucian el centro". El presidente francés Jacques Chirac ha condenado "con fuerza" el atentado expresando "su plena solidaridad" con la comunidad judía de Francia, según un comunicado emitido desde el Palacio del Elíseo en un comunicado.

Desde primeras horas de la mañana se multiplicaron las condenas unánimes contra esta agresión antisemita perpetrada en un espacio que desde 1914 y hasta los años 60 fue una sinagoga. Las agresiones antisemitas son cada vez más frecuentes en Francia, donde el pasado 14 de agosto se descubrieron una inscripción antisemita y una cruz gamada en el pórtico de la catedral de Notre Dame de París y unos días antes, en Lyon (este), el 9 de agosto, se profanaron 60 tumbas judías.
 

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