Menú

Medio centenar de personas intentan linchar al hombre acusado de degollar a la niña de 7 años en Ceuta

Más de medio centenar de personas, entre familiares, amigos y vecinos de la niña de 7 años degollada el pasado sábado, han intentando en la madrugada de este martes linchar al presunto asesino, detenido cerca de la medianoche tras entregarse a la Policía Nacional en la frontera que separa Ceuta de Marruecos. La manifestación airada de familiares y vecinos motivó la presencia de más de 40 efectivos de la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Policía Local, que tuvieron que emplear numeroso material antidisturbios para disolver a los que se habían concentrado.

L D (Agencias) La película de los hechos se inició cuando el supuesto infanticida, de nacionalidad marroquí y de filiación no facilitada, recibió una llamada telefónica por móvil desde Ceuta de una persona no identificada que le dijo que la pequeña no había muerto y que le aconsejó que se entregara a la policía, explicaron fuentes del entorno familiar.

El presunto asesino, compañero sentimental de la madre de la pequeña, que había huido a Marruecos tras degollar a la menor, al creer que no había muerto, regresó a territorio español cruzando la frontera del Tarajal para entregarse a la policía, informa Efe.

La noticia del arresto del presunto asesino en el paso fronterizo circuló rápidamente por el entorno de la víctima (musulmana y de nacionalidad española) y de los vecinos de la barriada del Príncipe Alfonso, que se agolparon en la frontera para intentar tomarse la justicia por su mano, refirieron fuentes policiales.

Más de 40 policías

La manifestación airada de familiares y vecinos motivó la presencia de más de 40 efectivos de la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Policía Local, que tuvieron que emplear numeroso material antidisturbios para disolver a los que se habían concentrado.

Los enfrentamientos entre vecinos y policías se prolongaron más allá de las tres de la madrugada, con el lanzamiento de numerosas piedras contra los agentes, aunque no llegaron a producirse heridos, como confirmó en la propia frontera la Guardia Civil.

Las inmediaciones de la frontera se convirtieron en un campo de batalla en el que se arrojaron piedras de la carretera con las que se rompieron los cristales de dos marquesinas de una parada de autobuses y se quemaron contenedores. Los agentes establecieron un dispositivo especial en las inmediaciones de la barriada y cortaron el acceso desde este núcleo poblacional hasta la frontera.

Pelea y Ramadán

La pelea coincidió con la ruptura del ayuno de los vecinos de la barriada del Príncipe Alfonso, donde la mayoría son de religión islámica y en estos días cumplen con el mes de ayuno del Ramadán, por lo que no pueden ingerir alimentos entre la salida y la puesta del sol.

Esta circunstancia motivó que muchos vecinos se encontraran paseando por las calles de esta localidad, como suele ser habitual después de las comidas, y que se desplazaran hasta la frontera, al estar situada a escasos cien metros de la barriada. Mientras tanto, el detenido fue trasladado a las dependencias de la Comisaría de la Policía Nacional, donde la policía estableció un dispositivo especial de control para impedir que se puedan producir nuevos altercados.

Fuentes policiales han explicado que se desconoce cuándo el juez le tomará declaración al detenido por su presunta participación en la muerte de la niña Suhaila, de 7 años, a la que degolló el pasado sábado. La toma de declaración al presunto asesino puede coincidir con el entierro de la menor, ya que se espera que sea enterrada en el cementerio musulmán de Sidi Embarek en las próximas horas bajo el rito islámico, al ser la niña de esta religión.

Temas

En Sociedad

    0
    comentarios