Davids, en su presentación con el Barcelona: "Puedo aportar experiencia y contagiarlo aquí"

L D (Agencias) Mientras Rijkaard y Begiristain abrían la puerta a un debut de Davids el próximo miércoles en la Copa del Rey frente al Levante, el presidente Laporta justificaba su consideración del ex centrocampista de la Juventus en su condición de jugador "mundialmente reconocido".

Sin embargo, el dirigente azulgrana justifica la razón principal de la llegada del holandés en la solicitud del entrenador y el secretario técnico, al tiempo que se felicita por la prontitud en complacerlos.

Pese a la hipótesis que en Italia apunta a que Edgar Davids ha firmado un compromiso para la próxima temporada con la Roma, Laporta insiste en que el Barcelona se ha reservado una opción para negociar con el jugador, del que destacó su esfuerzo por vestir de azulgrana con un contrato que incorpora en el apartado de retribución una variable en función de objetivos. Sin coste por la cesión hasta final de campaña, Laporta explicaba que su club incorpora a un futbolista "maduro mentalmente, con unas condiciones deportivas excepcionales y que se destaca por ser luchador".

 

El presidente del Barcelona, quien considera del todo intrascendente la nacionalidad de Davids, pese a la amplia colonia holandesa en el vestuario azulgrana, deja también la puerta abierta a alguna nueva incorporación en el mercado de invierno si así se lo plantean los técnicos, aunque dice contar con la comprensión de éstos ante las dificultades para atar en estos momentos jugadores. Davids, en su presentación, se mostraba agradecido con su nuevo club por la oportunidad que le brinda y explicaba que de su experiencia en los próximos meses dependerá su continuidad como barcelonista la próxima temporada, desvinculándola de la clasificación del equipo para la Liga de Campeones. El jugador asegura que tampoco le ha influido la numerosa presencia de compatriotas en su nuevo vestuario y confirmó que ha seguido al Barcelona esta campaña y que, "a veces, le ha faltado un poco de gol, pero tiene futuro".

Begiristain asegura que ni él ni Rijkaard dudaron cuando surgió la oportunidad de fichar a Davids, porque se trata de "un campeón, con una experiencia larga en equipo grandes con objetivos importantes que siempre ha cumplido sobradamente". Begiristain daba vía libre al debut el miércoles del jugador si no surgen problemas burocráticos, aunque deja la decisión final en manos de Rijkaard. Los motivos del fichaje, según el secretario técnico barcelonista, se justifican en la necesidad de la plantilla de contar con un futbolista de carácter en el mediocampo, del que espera que se convierta en un "referente" y al que presupuso la suficiente experiencia como para adaptarse rápidamente a los arbitrajes españoles.

 

Frank Rijkaard también espera una pronta integración de su compatriota, del que elogió su calidad técnica, pero especialmente su mentalidad ganadora, que públicamente había echado en falta en la actual plantilla azulgrana. "Con un jugador como Davids ganamos en equilibrio, que es muy importante para un equipo", ha añadido Rijkaard, quien ha confirmado que ya le ha explicado al centrocampista lo que espera de él, aunque se niega a desvelarlo para no dar pistas.

 

 

Poco antes del acto de presentación, Davids pasaba "con nota" la revisión médica, según Jordi Ardévol, responsable de los servicios médicos del club azulgrana. El jugador se sometía a las exploraciones habituales: una revisión radiológica, otra analítica, una prueba de esfuerzo, una ecocardiografía, un test de potencia muscular y una exploración general."Físicamente, teniendo en cuenta que tiene 31 años y una dilatada carrera, se nota que es un jugador que se ha cuidado. Se trata de un buen profesional, de un jugador que le gusta estar bien preparado", explicaba el médico barcelonista.

 

Ardévol había dicho que el holandés tendrá que mejorar la condición física, pero que los dos problemas médicos que ha arrastrado en su carrera: una fractura de tibia y peroné en 1997 y un glaucoma en 2000, están "bien resueltos". "El problema ocular (necesita unas gafas especiales) no altera su rendimiento deportivo. Está compensado y controlado, en perfecto estado", indicó.