L D (EFE) Suárez y Ruano Pascual definirán el título del primer Grand Slam del año con la pareja integrada por las cabeza de serie número cuatro, las rusas Svetlana Kuznetsova y Elena Likhovtseva. Será la octava final consecutiva que disputarán la argentina y la española.
"Es increíble, la verdad que es para no creer, pero es real, está sucediendo, y nos hace sentir muy felices a las dos", manifestaba Suárez después del partido. "Otra victoria que me alegra mucho. Quizá pudimos terminar el partido un poco antes, se nos complicó, pero al final lo pudimos asegurar. Estoy muy contenta, y a veces me pongo a pensar y me parece que todo lo que estamos viviendo es un sueño", añadía.
Al ser preguntaba sobre el partido ante la sudafricana y la japonesa, Suárez decía: "Se nos complicó en el segundos et y nos pusimos un poco tensas. Pero después vino el 5-5, volvimos a encontrar nuestro ritmo y lo pudimos cerrar". Sobre si se sienten las mejores del mundo, Suárez manifestaba que no, que sí se sentían como una pareja que se complementa muy bien. "No nos sentimos las mejores del mundo. Nos sentimos una muy buena pareja, con mucha garra y con una muy buena coordinación. Siempre tratamos de alentarnos, explotar nuestras cualidades y las debilidades de las rivales. Pero hay otras parejas excelentes en el circuito", destaca.
"Quizá somos las que más disfrutamos, nos divertimos mucho con Virginia cuando jugamos dobles, y eso hace que no pensemos mucho en los partidos y si estás en octavos, cuartos o semifinales de un torneo", añade. "No sentimos tanto la presión de ser las número uno, pensamos que tenemos que jugar cada partido como si fuera una final. No desestimamos nunca a las rivales, sino que estamos prendidas y concentradas en cada encuentro", concluyó Paola Suárez.
"Es increíble, la verdad que es para no creer, pero es real, está sucediendo, y nos hace sentir muy felices a las dos", manifestaba Suárez después del partido. "Otra victoria que me alegra mucho. Quizá pudimos terminar el partido un poco antes, se nos complicó, pero al final lo pudimos asegurar. Estoy muy contenta, y a veces me pongo a pensar y me parece que todo lo que estamos viviendo es un sueño", añadía.
Al ser preguntaba sobre el partido ante la sudafricana y la japonesa, Suárez decía: "Se nos complicó en el segundos et y nos pusimos un poco tensas. Pero después vino el 5-5, volvimos a encontrar nuestro ritmo y lo pudimos cerrar". Sobre si se sienten las mejores del mundo, Suárez manifestaba que no, que sí se sentían como una pareja que se complementa muy bien. "No nos sentimos las mejores del mundo. Nos sentimos una muy buena pareja, con mucha garra y con una muy buena coordinación. Siempre tratamos de alentarnos, explotar nuestras cualidades y las debilidades de las rivales. Pero hay otras parejas excelentes en el circuito", destaca.
"Quizá somos las que más disfrutamos, nos divertimos mucho con Virginia cuando jugamos dobles, y eso hace que no pensemos mucho en los partidos y si estás en octavos, cuartos o semifinales de un torneo", añade. "No sentimos tanto la presión de ser las número uno, pensamos que tenemos que jugar cada partido como si fuera una final. No desestimamos nunca a las rivales, sino que estamos prendidas y concentradas en cada encuentro", concluyó Paola Suárez.