LD (EFE) La nueva instalación se ha construido para dar respuesta al importante incremento de la demanda de energía eléctrica registrado en los últimos años en la zona norte de la Costa Brava, concretamente en la comarca del Alto Ampurdán.
La subestación, que transforma la alta tensión (132 kilovoltios) en media (25 kilovoltios), tiene una potencia de transformación de 10 megavatios-amperio (MVA) más 20 MVA de reserva, y un parque de media tensión de 25 kilovoltios con seis líneas de salida.
Todos estos equipos, unidos a la ubicación estratégica de la instalación en el territorio, hacen que la nueva subestación alimente directamente a un total de 12.484 clientes de Llançà y de siete municipios más de la comarca, como Portbou, Colera, Port de la Selva, Vilamaniscle, Garriguella y Vilajuïga i Pau.
Además, de forma indirecta, también puede suministrar a los municipios de Rosas, Cadaqués, Peralada, Cabanes, Sant Climent de Sescebes, Capmany, Cantallops, Rabós i Espolla.
La subestación, ubicada en el polígono número 2 de Llançà, se puso en marcha el pasado mes de diciembre y ha supuesto una inversión de 2,3 millones de euros por parte de Fecsa Endesa. Se trata de la tercera subestación de la compañía en la comarca, que también se alimenta de las instalaciones de Torre del Vent --en el municipio de Palau-Saverdera-- y Figueras.