L D (EFE) Al detenido en Murcia, Khaled Madani, quien trabajaba en un locutorio de esa provincia, el juez Ruiz Polanco le atribuye haber recibido tres o cuatro giros de unos 300 euros cada uno desde la ciudad alemana de Hamburgo, donde presuntamente se encontraba la célula de Al-Qaeda que planificó los atentados del 11-S en Estados Unidos.
Sin embargo, Madani aseguró al juez que desconocía la identidad del remitente de esos giros porque iban dirigidos a otra persona que no era él, y que también vivía en Murcia, y a la que ahora busca la Guardia Civil.
Madani negó también cualquier relación con la "célula de Hamburgo" y dijo no conocer a ninguno de su miembros. Por contra, tras su detención, el Ministerio del Interior aseguró que Madani, alias "Al Jazir", realizó actividades de apoyo logístico a esta célula mediante el suministro de documentación falsa a algunos de sus miembros. Entre ellos, se encontraría el coordinador de los atentados del 11-S, Ramzi Binalshib, quien se sospecha que en los meses previos a los ataques estuvo en España en compañía de Mohamed Atta, el piloto suicida que estrelló su avión contra la primera de las Torres Gemelas y que lideraba la célula de Hamburgo.
Laouar, por su parte, está considerado por Interior como un "activo colaborador" de Madani, además de tener numerosos antecedentes delictivos en Argelia y Francia, país este último que ha emitido varias órdenes de búsqueda y captura contra él, por lo que ahora se le abrirá el correspondiente proceso de extradición. Según la Guardia Civil, en los registros efectuados en los domicilios de los argelinos tras su detención se halló numerosa documentación, efectos para la falsificación de documentos, datos sobre cuentas y movimientos bancarios, así como una elevada cantidad de dinero, tres ordenadores y vídeos de propaganda de religiosos extremistas islámicos.