L D (Agencias) Entre 1997 y 1999, Richard Butler fue jefe de la Comisión Especial de las Naciones Unidas para el desarme iraquí (UNSCOM), responsable de localizar y desmantelar el programa de armas prohibidas del régimen de Sadam Husein.
Según ha explicado Butler a la emisora australiana ABC (nota íntegra, en inglés), cuando quería hacer llamadas telefónicas confidenciales tenía que salir del edificio de la ONU y dirigirse a un café o a uno de los teléfonos públicos de Central Park.
"Tenía toda la seguridad de que (mi teléfono) estaba siendo intervenido al menos por cuatro miembros permanentes del Consejo de Seguridad (de la ONU), los estadounidenses, los británicos, los franceses y los rusos. No sé lo que harían los chinos", ha declarado Butler. Según el funcionario, que actualmente es gobernador del estado australiano de Tasmania, sabía que todos esos países les espiaban "porque aquellos que lo hacían venían a mi para enseñarme las grabaciones que habían hecho de otros, con la intención de ayudarme en mi trabajo".
Estas revelaciones de espionaje surgen después de que la ex ministra británica de Cooperación Clare Short declarara el jueves a la BBC que la inteligencia británica espió al secretario general de la ONU, Kofi Annan , antes del comienzo de la contienda militar en Irak. "Lo sé, he visto transcripciones de las conversaciones de Kofi Annan; ciertamente, he tenido conversaciones con Kofi en los días previos a la guerra en las que he pensado: 'Va a haber una transcripción de esto y la gente verá lo que él y yo estamos diciendo'", relató la ex ministra a la BBC . (Ampliación)
El ministro australiano de Asuntos Exteriores, Alexander Downer , ha declarado que toda esta controversia, agitada este viernes por la ABC australiana, "es resultado de los estúpidos comentarios de Clare Short", porque ningún gobierno revela cuestiones operativas de sus servicios secretos.