L D (EFE) Un preámbulo de violencia ha precedido la clausura de la XII Cumbre del G-15 tras un luctuoso viernes, con dos muertos y decenas de heridos en enfrentamientos entre policía y manifestantes que pedían un referendo contra el presidente Chávez. La revuelta estalló a primeras horas de la tarde, cuando la cabeza de una multitudinaria manifestación pretendió superar el cordón de protección militar alrededor de la sede de la Cumbre, en el centro de la capital venezolana.
Gobierno y oposición se culparon mutuamente de provocar la violencia durante la manifestación, convocada por la coalición opositora Coordinadora Democrática. El ministro del Interior, Lucas Rincón, lamentó los disturbios y culpó de ellos a la Coordinadora por haber lanzado "irracionalmente" a los manifestantes contra las fuerzas del perímetro de seguridad. El ministro indicó que los hechos de la jornada pretendieron reproducir lo ocurrido antes del golpe de Estado de abril de 2002 cuando francotiradores mataron a simpatizantes del gobierno y de la oposición.
La oposición emitió un comunicado en el que califico la manifestación como un "acto de coraje" y señaló que la Guardia Nacional llevó a cabo una "brutal represión reforzada por bandas asesinas", afectas al Gobierno. En su comunicado, la Coordinadora vinculó el cese de las manifestaciones a que el Consejo Nacional Electoral reconozca como válidas las firmas que presentó para activar un referendo contra el presidente Chávez. Gobierno y oposición se culparon mutuamente de provocar la violencia durante la manifestación, convocada por la coalición opositora Coordinadora Democrática. El ministro del Interior, Lucas Rincón, lamentó los disturbios y culpó de ellos a la Coordinadora por haber lanzado "irracionalmente" a los manifestantes contra las fuerzas del perímetro de seguridad. El ministro indicó que los hechos de la jornada pretendieron reproducir lo ocurrido antes del golpe de Estado de abril de 2002 cuando francotiradores mataron a simpatizantes del gobierno y de la oposición.
Las autoridades electorales tienen de plazo hasta este domingo para decir cuántas son las firmas válidas tras el proceso de depuración, después de lo cual habrá un plazo de cinco días para presentar reclamaciones.