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Incendiadas 17 iglesias y monasterios serbios ortodoxos en los enfrentamientos étnicos de Kosovo

Las autoridades de las fuerzas de la ONU y de la OTAN desplegadas en Kosovo han confirmado que al menos 17 iglesias y monasterios serbios ortodoxos, la mayoría joyas de la arquitectura medieval, han sido incendiadas por extremistas albano-kosovares durante los violentos enfrentamientos interétnicos que a la fecha se han cobrado la vida de 31 personas.

LD (Agencias) La agencia de noticias serbia Beta, ha informado de que los mandos de las fuerzas de la ONU y la OTAN (KFOR), confirman que al menos 17 iglesias y monasterios serbios ortodoxos, la mayoría joyas de la arquitectura medieval, fueron destruidos en la provincia serbia de Kosovo desde que el miércoles pasado estallaran diversos episodios violentos entre las comunidades serbia y albanesa.
 
Fuentes de la Iglesia ortodoxa han dicho que todos los edificios religiosos serbios de la ciudad de Prizren (en el suroeste) y de sus inmediaciones fueron incendiados. Allí se consumieron las iglesias Bogorodica Ljeviska, que data del siglo XI; San Jorge, San Jorge Runovic y San Spas, el monasterio del Santo Arcángel y el Palacio Episcopal.  Entre otros edificios demolidos figuran también la iglesia de San Uros en Urosevac (sureste), San Nicolás de Kosovo Polje (centro), Santa Catalina de Bresje (centro), San Nicolás de Belo Polje (oeste), San Juan de Pec (noroeste), la Ascensión de Djakovica (oeste) y San Nicolás de Gnjilane (este).  Desde 1999, más de 150 iglesias y monasterios serbios han sido destruidos por albaneses en Kosovo.
 
Al amanecer de este viernes, las protestas y agresiones de albaneses cesaron poco después de la medianoche de este jueves, después de que en Pristina la Policía de la ONU interviniera contra grupos que incendiaron la iglesia local serbia. Por su parte, el personal de la ONU evacuó su sede en la parte sur (albanesa) de la dividida ciudad septentrional de Mitrovica, después de que durante la tarde de este jueves en esa zona se registraran choques entre manifestantes albaneses y la Fuerza para Kosovo (KFOR, de la OTAN). Según informaciones extraoficiales, un soldado danés de la KFOR resultó gravemente herido por disparos de un francotirador desde un edificio en el que viven albaneses en la parte norte de Mitrovica, poblada mayoritariamente por serbios. Fuentes serbias locales informaron de que poco después varios proyectiles impactaron en las cercanías del hospital serbio, sin causar víctimas ni heridos.
 
En Mitrovica , donde el miércoles pasado comenzaron los disturbios que luego se extendieron por todo Kosovo, fue impuesto el toque de queda nocturno, al igual que en Gnjilane, Urosevac, Vitina y Kamenica, localidades del este de la provincia. El detonante de la violencia fue la muerte de dos niños albaneses ahogados en el río Ibar que divide Mitrovica, de la que los albaneses acusaron a la minoría serbia.

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