L D (Agencias) La Audiencia Nacional ha condenado a Xirinacs, por enaltecimiento de conductas terroristas, a una pena de dos años de cárcel y cuatro de inhabilitación. Se declaró "amigo de ETA" en un discurso del 11 de septiembre de 2002 en Barcelona, con motivo del "Día Nacional de Cataluña". En una entrevista concedida a Europa Press, el ex senador independentista sostiene que sus declaraciones sobre el terrorismo en el País Vasco que le han supuesto la condena "no pretendían incitar al terrorismo", como concluye la sentencia. "Pretendía lo contrario, como he hecho toda mi vida", apunta.
Xirinacs, que no deberá cumplir la pena, declaró que pretendía dar "una nota de serenidad, porque la serenidad se pierde cuando hay una guerra desigual, como ésta entre España, que tiene un ejército inmenso, y las cuatro pistolas que tiene ETA". El ex senador justificó esta "nota de serenidad" por la necesidad de advertir sobre este desequilibrio, ya que "en una guerra desigual, la gente se pone al lado de los poderosos". "Madrid tiene conquistado el País Vasco, y no al revés", añadió.
Ofensa a las víctimas del terrorismo
Xirinacs explicó que "en este conflicto hay que buscar las causas: lo único pendiente es la independencia de Euskadi", mientras que "la única del PP y del PSOE es la derrota: sólo están dispuestos a negociar con ETA si se considera derrotada, entregando las armas". También tuvo palabras para la Asociación de Víctimas de Terrorismo, que se querelló contra él por apología del terrorismo. Aseguró sentir "un dolor doble del de ellos" porque entre las víctimas de ETA "hay muertos y heridos", pero en ETA "también, y además, hay torturados".
La postura de su "amigo" Carod