L D (Agencias) "No teníamos ninguna información previa de que hoy se iban a producir disturbios, por eso no restringimos la entrada de feligreses al Monte del Templo", declaró el jefe de Policía de Jerusalén, Miky Levy, tras la operación.
Desde que comenzó la denominada Intifada de Al-Aqsa (septiembre de 2000), y particularmente durante el mes de ayuno de Ramadán, la Policía israelí suele prohibir la entrada al recinto a los menores de 45 años, con el fin de evitar que se desencadenen disturbios como los de este viernes.
Fuentes palestinas citadas por la agencia EFE cifran en al menos 15 el número de heridos por los proyectiles de caucho y la inhalación de gases lacrimógenos que lanzaron las fuerzas de seguridad. Por su parte, la Policía israelí informa de que hay 14 personas arrestadas por alterar el orden público.
Desde que comenzó la denominada Intifada de Al-Aqsa (septiembre de 2000), y particularmente durante el mes de ayuno de Ramadán, la Policía israelí suele prohibir la entrada al recinto a los menores de 45 años, con el fin de evitar que se desencadenen disturbios como los de este viernes.
Fuentes palestinas citadas por la agencia EFE cifran en al menos 15 el número de heridos por los proyectiles de caucho y la inhalación de gases lacrimógenos que lanzaron las fuerzas de seguridad. Por su parte, la Policía israelí informa de que hay 14 personas arrestadas por alterar el orden público.
Cuando la Policía israelí entró en la Explanada de las Mezquitas, miles de musulmanes se atrincheraron en la mezquita de Al-Aqsa. Los feligreses abandonaron el recinto sagrado después de que los dirigentes del Wakf Islámico –administrador de los lugares sagrados musulmanes– negociaran un acuerdo con la Policía para poner fin al encierro de forma pacífica.
Entre tanto, tres palestinos morían a lo largo de la jornada en tres sucesos separados. Así, un terrorista armado con un fusil kalashnikov y varias granadas fue abatido por soldados israelíes cuando se aproximaba a la carretera que discurre entre los asentamientos de Karni y Netzarim (Gaza), mientras que otro caía en un lugar cercano a la frontera de Gaza con Egipto durante un enfrentamiento con fuerzas israelíes. El tercer fallecido es un adolescente de 16 años, que recibió un disparo cuando lanzaba piedras, junto a otros jóvenes, a la entrada de la ciudad de Belén, cerca de la Tumba de Raquel.