L D (EFE) Después de confirmar este lunes que los 26 reclusos fueron maltratados por trabajadores penitenciarios durante su traslado a otras cárceles catalanas tras el motín del 30 de abril en la prisión de Quatre Camins, Vallés ha negado este martes en declaraciones al programa 'Hoy por hoy' de la Cadena Ser que la investigación interna hecha por su departamento por estos hechos suponga una acusación contra todo el colectivo de trabajadores penitenciarios.
El titular de Justicia ha explicado las agresiones que presuntamente sufrieron los presos de Quatre Camins (La Roca del Vallés) la noche del motín y en días posteriores son "casos aislados" y que "no "empañan el honor de un colectivo de 3.000 trabajadores". El consejero ha dejado claro que su departamento "se ha limitado a hacer una información reservada que recoge denuncias de internos de presuntos maltratos que no incluye acusaciones contra ningún funcionario".
El titular de Justicia ha explicado las agresiones que presuntamente sufrieron los presos de Quatre Camins (La Roca del Vallés) la noche del motín y en días posteriores son "casos aislados" y que "no "empañan el honor de un colectivo de 3.000 trabajadores". El consejero ha dejado claro que su departamento "se ha limitado a hacer una información reservada que recoge denuncias de internos de presuntos maltratos que no incluye acusaciones contra ningún funcionario".
Este informe se ha remitido a la fiscalía para que investigue si los hechos son constitutivos de delito, aunque la Generalidad continuará con su investigación interna para depurar posibles responsabilidades administrativas.
Josep Maria Vallés ha reconocido, no obstante, que los trabajadores de las prisiones forman un colectivo que desarrolla su trabajo "en condiciones difíciles", teniendo en cuenta que las prisiones catalanas están apunto de alcanzar la "cifra fatídica" de los 8.000 internos. "El sistema penitenciario en Cataluña y en todo el Estado está sometido a una presión insostenible como resultado de una legislación penal que no ha tenido en cuenta que la función constitucional del sistema penitenciario es la reeducación y la reinserción", ha remarcado el titular de Justicia.
Josep Maria Vallés ha reconocido, no obstante, que los trabajadores de las prisiones forman un colectivo que desarrolla su trabajo "en condiciones difíciles", teniendo en cuenta que las prisiones catalanas están apunto de alcanzar la "cifra fatídica" de los 8.000 internos. "El sistema penitenciario en Cataluña y en todo el Estado está sometido a una presión insostenible como resultado de una legislación penal que no ha tenido en cuenta que la función constitucional del sistema penitenciario es la reeducación y la reinserción", ha remarcado el titular de Justicia.
En ruedas de prensa en el Parlament, el portavoz parlamentario de CiU, Felip Puig, y el portavoz del PPC, Daniel Sirera, han tildado de "irresponsable" y "frívola" la actuación del consejero en este caso, mientras que ERC e ICV han salido en defensa del consejero.