L D ( Agencias ) El Gobierno filipino ha cedido al chantaje terrorista y ha terminado de retirar las tropas que tenía en Irak. Esta era la exigencia fundamental de los terroristas para la liberación del filipino secuestrado. Los terroristas habían fijado el 31 de julio como fecha tope para que Manila retirase a todos sus efectivos de Irak. El contingente iba a concluir su misión el próximo 20 de agosto, pero los secuestradores amenazaron con decapitar al rehén si no se adelantaba la fecha.
Para evitar esta circunstancia, el Gobierno de Filipinas ha retirado su pequeño contingente militar presente en Irak un mes antes de lo previsto.
Filipinas tenía hasta este lunes a 43 soldados y 8 policías en territorio iraquí desempeñando funciones humanitarias y con mandato hasta el 20 de agosto. Además, en Irak viven más de 3.000 civiles filipinos que, en su mayoría, trabajan en las bases militares de la coalición
El filipino Angelo de la Cruz, ya liberado, trabajaba como conductor de camión en Irak, tiene 46 años y es padre de ocho hijos.