L D (EFE) El imán, de 47 años, fue trasladado este jueves a la sede de esa brigada policial desde la prisión de alta de Belmarsh (sudeste de Londres), en la que estaba recluido desde el pasado mayo en respuesta a una solicitud de extradición de Estados Unidos, que le acusa de once delitos de terrorismo. Un portavoz policial aclaró que las nuevas acusaciones contra el imán forman "parte de unas investigaciones separadas y nacionales" que, en principio, no están relacionadas con las imputaciones de las autoridades estadounidenses.
En caso de que la policía británica formulase cargos contra Hamza, esa acusación formal tendría preferencia sobre el proceso de extradición, que podría prolongarse durante meses. La Fiscalía británica subrayó que la solicitud de extradición cursada por Estados Unidos y su las investigaciones policiales en virtud de la Ley de Terrorismo del Reino Unido son "asuntos completamente separados". Según la Fiscalía, "estamos en contacto con la Policía Metropolitana (de Londres) y esperaremos a ver si hay suficientes pruebas como para que podamos presentar una acusación" contra Hamza.
En caso de que la policía británica formulase cargos contra Hamza, esa acusación formal tendría preferencia sobre el proceso de extradición, que podría prolongarse durante meses. La Fiscalía británica subrayó que la solicitud de extradición cursada por Estados Unidos y su las investigaciones policiales en virtud de la Ley de Terrorismo del Reino Unido son "asuntos completamente separados". Según la Fiscalía, "estamos en contacto con la Policía Metropolitana (de Londres) y esperaremos a ver si hay suficientes pruebas como para que podamos presentar una acusación" contra Hamza.
Según EEUU, Hamza ha propugnado la violencia contra EEUU
El imán compareció el pasado 23 de julio en el tribunal de Belmarsh, en la primera vista del proceso para extraditarle a Estados Unidos. Un juez escuchó a las partes implicadas y decidió aplazar hasta el 19 de octubre el juicio, a petición de los abogados del imán, que desean más tiempo para preparar la defensa de su cliente y alegan que éste no tendrá un proceso justo en el país norteamericano.
El abogado que representa a EEUU, James Lewis, acusó al clérigo de ser "miembro de una conspiración global para hacer la jihad (guerra santa musulmana) contra los Estados Unidos y otros países". Según argumentó Lewis, Hamza "ha propugnado, de forma consistente, el odio y la violencia contra los EEUU, que él denomina "Serpientes Unidas de América".
Acusado de varios delitos de terrorismo
Entre los once cargos que le imputan las autoridades norteamericanas, figura su participación en el secuestro de 16 turistas occidentales en Yemen hace seis años, que acabó con la muerte de cuatro rehenes. Asimismo, Hamza, a quien el Reino Unido trata de retirarle la nacionalidad británica, está acusado de organizar un campo de entrenamiento terrorista en Estados Unidos, con el fin de formar a combatientes para luchar en Afganistán.
El imán, asumido admirador del líder de la red terrorista Al Qaeda Osama Ben Laden, alcanzó notoriedad en este país por sus diatribas contra Occidente, predicadas a las puertas de la mezquita de Finsbury Park, en el norte de Londres. Hamza, que perdió un ojo al luchar en Afganistán contra las tropas soviéticas y luce un garfio por la mano que perdió en ese conflicto, niega las acusaciones de terrorismo y asegura que sólo es portavoz de causas políticas.
Presentado por la prensa sensacionalista británica como "el hombre más odiado" de este país, Hamza reside en el Reino Unido desde 1979 y obtuvo la nacionalidad británica dos años después, tras casarse con una ciudadana inglesa de la que se divorció más tarde.
Entre los once cargos que le imputan las autoridades norteamericanas, figura su participación en el secuestro de 16 turistas occidentales en Yemen hace seis años, que acabó con la muerte de cuatro rehenes. Asimismo, Hamza, a quien el Reino Unido trata de retirarle la nacionalidad británica, está acusado de organizar un campo de entrenamiento terrorista en Estados Unidos, con el fin de formar a combatientes para luchar en Afganistán.
El imán, asumido admirador del líder de la red terrorista Al Qaeda Osama Ben Laden, alcanzó notoriedad en este país por sus diatribas contra Occidente, predicadas a las puertas de la mezquita de Finsbury Park, en el norte de Londres. Hamza, que perdió un ojo al luchar en Afganistán contra las tropas soviéticas y luce un garfio por la mano que perdió en ese conflicto, niega las acusaciones de terrorismo y asegura que sólo es portavoz de causas políticas.
Presentado por la prensa sensacionalista británica como "el hombre más odiado" de este país, Hamza reside en el Reino Unido desde 1979 y obtuvo la nacionalidad británica dos años después, tras casarse con una ciudadana inglesa de la que se divorció más tarde.