L D (EFE) Ante decenas de personas deseosas de conseguir una firma del internacional español, Gasol se mostró en todo momento simpático con sus aficionados, con los que se prestó a hacerse fotos y saludó siempre que se lo pidieron, además de plasmar constantemente su rúbrica sobre camisetas, balones y todo tipo de objetos deportivos.
Pero antes de entregarse a su público, Gasol se mostró receptivo hacia los medios de comunicación, sabedores de que ésta sería una de las últimas oportunidades para obtener declaraciones del pívot catalán antes de su retorno a Estados Unidos. Precisamente, tuvo palabras sobre su nueva etapa americana, y se mostró, en lo personal, muy ambicioso: "Tengo ganas de demostrar que puedo hacer más de lo que vengo haciendo. Demostrar, una vez más, que Pau Gasol es un gran jugador".
Sobre su equipo, los Grizzlies de Memphis, ha estado más cauto, a pesar de la última buena temporada en que consiguieron meterse en los play-offs de la NBA, y se limitaba a aclarar que el techo del equipo lo decidirá "la evolución del día a día", aunque muestra su deseo de "competir a final de temporada con los mejores".
Las preguntas han girado también sobre la polémica en su ex equipo, el Barcelona, que ha visto cómo en los últimos días, tras problemas con la directiva, se despedía su entrenador, Svetislav Pesic, con el que los azulgranas conquistaron la Euroliga, la Liga ACB y la Copa del Rey hace dos años, un hito histórico en el club catalán. Gasol considera que esta situación "no es muy normal" y que ha causado "controversia" por las "diferencias varias" entre ambas partes, pero confía en que "el equipo sea lo suficientemente maduro para sobreponerse". "Muy positivo no va a ser al principio. Espero que el cambio sea para mejor", sentenciaba el de Sant Boi, deseando lo mejor a su hermano Marc y sus ex compañeros para la nueva temporada.
Tras estas declaraciones le esperaba el aluvión de personas con ganas de conseguir un recuerdo de Gasol, que estuvo ocupado en esta tarea durante más de una hora, en una despedida multitudinaria ante la afición española.
Pero antes de entregarse a su público, Gasol se mostró receptivo hacia los medios de comunicación, sabedores de que ésta sería una de las últimas oportunidades para obtener declaraciones del pívot catalán antes de su retorno a Estados Unidos. Precisamente, tuvo palabras sobre su nueva etapa americana, y se mostró, en lo personal, muy ambicioso: "Tengo ganas de demostrar que puedo hacer más de lo que vengo haciendo. Demostrar, una vez más, que Pau Gasol es un gran jugador".
Sobre su equipo, los Grizzlies de Memphis, ha estado más cauto, a pesar de la última buena temporada en que consiguieron meterse en los play-offs de la NBA, y se limitaba a aclarar que el techo del equipo lo decidirá "la evolución del día a día", aunque muestra su deseo de "competir a final de temporada con los mejores".
Las preguntas han girado también sobre la polémica en su ex equipo, el Barcelona, que ha visto cómo en los últimos días, tras problemas con la directiva, se despedía su entrenador, Svetislav Pesic, con el que los azulgranas conquistaron la Euroliga, la Liga ACB y la Copa del Rey hace dos años, un hito histórico en el club catalán. Gasol considera que esta situación "no es muy normal" y que ha causado "controversia" por las "diferencias varias" entre ambas partes, pero confía en que "el equipo sea lo suficientemente maduro para sobreponerse". "Muy positivo no va a ser al principio. Espero que el cambio sea para mejor", sentenciaba el de Sant Boi, deseando lo mejor a su hermano Marc y sus ex compañeros para la nueva temporada.
Tras estas declaraciones le esperaba el aluvión de personas con ganas de conseguir un recuerdo de Gasol, que estuvo ocupado en esta tarea durante más de una hora, en una despedida multitudinaria ante la afición española.