LD (EFE) El beneficio obtenido por la banca en 2004 es consecuencia del incremento del negocio y de una mayor prestación de servicios, según la AEB, que también destaca la moderación en los gastos de explotación de estas entidades, que se incrementaron por debajo del tres por ciento.
En la cuenta de resultados, el margen de intermediación –la diferencia entre lo que las entidades ingresas por sus créditos y pagan por sus depósitos– creció el 6,9 por ciento, hasta los 21.024 millones de euros. Las comisiones crecieron el 7,6 por ciento –gracias a los mayores saldos gestionados en fondos de inversión y pensiones, así como a las tarjetas–, hasta superar los 10.000 millones de euros, y, por el contrario, los resultados de operaciones financieras cayeron un 6,4 por ciento.
Así, el margen ordinario se situó en los 32.883 millones de euros, el 6,3 por ciento superior, lo que, unido a que los gastos de explotación sólo crecieron el 2,9 por ciento, provocó que el margen de explotación –que mide el negocio típico– aumentara el 11,4 por ciento, hasta los 15.366 millones de euros. El ratio de eficiencia –el porcentaje de ingresos que consumen los gastos– mejoró en 1,6 puntos respecto a 2003 y se estableció en el 47,6 por ciento.
En la parte baja de la cuenta de resultados, el conjunto de dotaciones y resultados extraordinarios restaron a los beneficios de la banca casi 3.875 millones, un 13,7 por ciento más, debido en gran parte a las "importantes dotaciones" a fondos de cobertura de contingencias diversas, así como a las prejubilaciones de personal.
En la cuenta de resultados, el margen de intermediación –la diferencia entre lo que las entidades ingresas por sus créditos y pagan por sus depósitos– creció el 6,9 por ciento, hasta los 21.024 millones de euros. Las comisiones crecieron el 7,6 por ciento –gracias a los mayores saldos gestionados en fondos de inversión y pensiones, así como a las tarjetas–, hasta superar los 10.000 millones de euros, y, por el contrario, los resultados de operaciones financieras cayeron un 6,4 por ciento.
Así, el margen ordinario se situó en los 32.883 millones de euros, el 6,3 por ciento superior, lo que, unido a que los gastos de explotación sólo crecieron el 2,9 por ciento, provocó que el margen de explotación –que mide el negocio típico– aumentara el 11,4 por ciento, hasta los 15.366 millones de euros. El ratio de eficiencia –el porcentaje de ingresos que consumen los gastos– mejoró en 1,6 puntos respecto a 2003 y se estableció en el 47,6 por ciento.
En la parte baja de la cuenta de resultados, el conjunto de dotaciones y resultados extraordinarios restaron a los beneficios de la banca casi 3.875 millones, un 13,7 por ciento más, debido en gran parte a las "importantes dotaciones" a fondos de cobertura de contingencias diversas, así como a las prejubilaciones de personal.