(Libertad Digital) PP, consumidores y hasta gobiernos del PSOE, como el catalán o el asturiano, han criticado con dureza la intención de María Antonia Trujillo de construir vivienda protegida de 25 metros cuadrados. 48 horas después, la ministra de Vivienda se desmarca del proyecto y señala como autores de la idea a "un grupo de arquitectos". Presionada por las críticas, la ministra de Vivienda ha asegurado que no está prevista la inclusión de esta medida en el Plan de Vivienda ni en las políticas de VPO.
En declaraciones a la Cadena SER, la ministra ha defendido que estos pisos se plantearían únicamente como viviendas "transitorias" para jóvenes, destinadas al alquiler y basadas en experiencias que han tenido "mucho éxito" en otros países europeos. Según ha admitido, se trata de un modelo de vivienda exitoso en diversos países de la UE, pero es posible que la cultura española no llegue todavía a entender este tipo de propuestas. "Probablemente en España todavía sea una idea que no pueda cuajar", indicó.
Trujillo ha reiterado en distintos momentos de la entrevista que se trata de una iniciativa innovadora de un sector profesional, los arquitectos, que interviene en el sector inmobiliario. Por ello, no entiende el aluvión de críticas que ha recibido por hacerse "eco" de una nueva solución para acceder a la vivienda y que, como propuesta, consiste en una "superficie limitada para jóvenes, en régimen de alquiler y de forma transitoria a precio limitado".
Igualmente, ha asegurado que los "minipisos" no tendrían servicios comunes, sino que se trataría de apartamentos de 30 metros cuadrados, con dormitorio, salón, cocina y baño, y garantizó que los precios serían "limitados" y que se tendrían en cuenta aspectos como la distribución de la casa, la iluminación o el equipamiento. Además, ha recordado que actualmente la vivienda protegida ya oscila entre los 40 y 90 metros cuadrados y se incrementa a 120 metros si se trata de una familia numerosa.