L D (EFE) La capital egipcia se vio sacudida el sábado por dos atentados casi simultáneos contra turistas: en el primero, un suicida se lanzó desde un puente contra un grupo de extranjeros, y dejó a siete personas heridas, entre los que había dos israelíes, un italiano y un sueco. En el segundo, dos mujeres, que según las autoridades eran la hermana y la prometida del suicida, dispararon contra un autobús de turistas cerca de la Ciudadela (el segundo lugar más visitado de El Cairo tras las Pirámides), sin lograr herir a nadie, y luego se mataron entre ellas al verse rodeadas por la policía.
Este domingo, según pudo comprobar EFE, la policía había instalado nuevos puestos de control en varios puntos de El Cairo donde paraba a todos los microbuses (el medio de transporte más popular) y registraba sistemáticamente a todos los hombres de entre 15 y 30 años. Asimismo, y según testigos, las medidas de seguridad han sido intensificadas en el aeropuerto internacional de El Cairo, el de más tráfico de Africa, y en los lugares más frecuentados por turistas.
Según el diario Al Ahram, la policía está buscando intensamente al hermano de Ihab Yusri, el suicida del sábado, por sospecharse que pudo tener alguna relación con el atentado. La versión oficial egipcia transmitida anoche por el ministerio del Interior asegura que Ihab Yusri estuvo implicado en el atentado del siete de abril pasado en las cercanías del bazar de Jan al Jalili (centro histórico de El Cairo), que dejó tres turistas muertos, y estaba siendo activamente buscado por la policía.
De hecho, el joven tenía a la policía tras él en el momento en que decidió arrojarse sobre un grupo de turistas, siempre según esta versión. Otro implicado en el atentado del siete de abril, Ashraf Said Yusef, sigue también huido, pero en las investigaciones para dar con su paradero la policía detuvo a su primo Mohamed Suleiman Yusef, quien más tarde murió en una comisaría en el curso de los interrogatorios. Un detalle nuevo que se ha conocido este domingo y que filtró el diario Al Ahram es que las dos mujeres relacionadas con el suicida no atacaron un autobús cualquiera, sino uno en el que viajaban cuarenta turistas israelíes, sin que esté claro si ellas conocían este detalle.
Este domingo, según pudo comprobar EFE, la policía había instalado nuevos puestos de control en varios puntos de El Cairo donde paraba a todos los microbuses (el medio de transporte más popular) y registraba sistemáticamente a todos los hombres de entre 15 y 30 años. Asimismo, y según testigos, las medidas de seguridad han sido intensificadas en el aeropuerto internacional de El Cairo, el de más tráfico de Africa, y en los lugares más frecuentados por turistas.
Según el diario Al Ahram, la policía está buscando intensamente al hermano de Ihab Yusri, el suicida del sábado, por sospecharse que pudo tener alguna relación con el atentado. La versión oficial egipcia transmitida anoche por el ministerio del Interior asegura que Ihab Yusri estuvo implicado en el atentado del siete de abril pasado en las cercanías del bazar de Jan al Jalili (centro histórico de El Cairo), que dejó tres turistas muertos, y estaba siendo activamente buscado por la policía.
De hecho, el joven tenía a la policía tras él en el momento en que decidió arrojarse sobre un grupo de turistas, siempre según esta versión. Otro implicado en el atentado del siete de abril, Ashraf Said Yusef, sigue también huido, pero en las investigaciones para dar con su paradero la policía detuvo a su primo Mohamed Suleiman Yusef, quien más tarde murió en una comisaría en el curso de los interrogatorios. Un detalle nuevo que se ha conocido este domingo y que filtró el diario Al Ahram es que las dos mujeres relacionadas con el suicida no atacaron un autobús cualquiera, sino uno en el que viajaban cuarenta turistas israelíes, sin que esté claro si ellas conocían este detalle.