L D (EFE) En una entrevista difundida por la propia FIA, Mosley ha dicho que el patrón de la Fórmula Uno, Bernie Ecclestone, y el director del circuito de Indianápolis, Tony George, "deberían anunciar", tras hablar con la empresa francesa, "que todo aquel que posea una entrada para el Gran Premio de Indianápolis de 2005 puede validarla para el año que viene".
En cuanto a la negativa de la Federación de colocar una variante en la curva 13, tal y como pidieron los equipos de Michelin, el presidente ha dicho que hubiera "sido muy imprudente realizar cambios drásticos en un circuito sin los consiguientes ensayos de neumáticos y sin las pruebas pertinentes". Además, señala que su colocación "sería injusta", porque supondría "una gran desventaja para aquellos equipos que estaban correctamente preparados para el circuito".
Mosley ha manifestado que "hubiera sido potencialmente peligroso porque rompería la naturaleza del circuito", sin estar "inspeccionado y homologado con todas las simulaciones y cálculos que estos procedimientos requieren". "Supongamos que hay un fatal accidente. ¿Cómo justificaremos haber violado nuestros procedimientos de seguridad?", se preguntaba.
El presidente, que afirma que ellos dieron todas las posibilidades para que el Gran Premio se disputara, destaca que los equipos con Michelin hubieran podido utilizar la calle de boxes ( pit lane ) en cada vuelta para evitar la curva 13, por lo que "es difícil entender por qué no lo hicieron". "Podían conseguir el puesto séptimo u octavo, u otro mejor, si alguno de los seis coches que utilizaban Bridgeston no hubieran terminado. Esos puntos podrían cambiar el campeonato", dice Mosley.
Asimismo, dice que no ha ordenado a Michelin contar los detalles de los recientes fracasos de neumáticos en su página web, tal y como se venía rumoreando, y que mantienen "una excelente relación con las dos compañías de neumáticos". Mosley asegura que el 29 de junio, en París, escucharán lo que los equipos tienen que decir y que la atmósfera será tranquila, y que confía en que los miembros del consejo tomen una decisión justa y equilibrada sobre este asunto.
La FIA ha convocado para el 29 de junio en su sede de París a los siete equipos cuyos monoplazas están equipados con neumáticos de la marca francesa Michelin y que el domingo se retiraron del Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula Uno tras la vuelta de formación. Esas siete escuderías, que exigían para participar en Indianápolis la colocación de una variante en la curva 13 del trazado estadounidense en vista de que Michelin no garantizaba que sus neumáticos traseros izquierdos aguantasen toda la prueba, han sido convocados para declarar el miércoles de la semana que viene ante el Consejo Mundial de la FIA.
El Gran Premio de Estados Unidos se disputó el domingo con sólo tres equipos (seis monoplazas) en pista, los que utilizan neumáticos de la marca japonesa Bridgestone: Ferrari, Jordan y Minardi. El resto volvió a boxes nada más completar la vuelta de formación.
En cuanto a la negativa de la Federación de colocar una variante en la curva 13, tal y como pidieron los equipos de Michelin, el presidente ha dicho que hubiera "sido muy imprudente realizar cambios drásticos en un circuito sin los consiguientes ensayos de neumáticos y sin las pruebas pertinentes". Además, señala que su colocación "sería injusta", porque supondría "una gran desventaja para aquellos equipos que estaban correctamente preparados para el circuito".
Mosley ha manifestado que "hubiera sido potencialmente peligroso porque rompería la naturaleza del circuito", sin estar "inspeccionado y homologado con todas las simulaciones y cálculos que estos procedimientos requieren". "Supongamos que hay un fatal accidente. ¿Cómo justificaremos haber violado nuestros procedimientos de seguridad?", se preguntaba.
El presidente, que afirma que ellos dieron todas las posibilidades para que el Gran Premio se disputara, destaca que los equipos con Michelin hubieran podido utilizar la calle de boxes ( pit lane ) en cada vuelta para evitar la curva 13, por lo que "es difícil entender por qué no lo hicieron". "Podían conseguir el puesto séptimo u octavo, u otro mejor, si alguno de los seis coches que utilizaban Bridgeston no hubieran terminado. Esos puntos podrían cambiar el campeonato", dice Mosley.
Asimismo, dice que no ha ordenado a Michelin contar los detalles de los recientes fracasos de neumáticos en su página web, tal y como se venía rumoreando, y que mantienen "una excelente relación con las dos compañías de neumáticos". Mosley asegura que el 29 de junio, en París, escucharán lo que los equipos tienen que decir y que la atmósfera será tranquila, y que confía en que los miembros del consejo tomen una decisión justa y equilibrada sobre este asunto.
La FIA ha convocado para el 29 de junio en su sede de París a los siete equipos cuyos monoplazas están equipados con neumáticos de la marca francesa Michelin y que el domingo se retiraron del Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula Uno tras la vuelta de formación. Esas siete escuderías, que exigían para participar en Indianápolis la colocación de una variante en la curva 13 del trazado estadounidense en vista de que Michelin no garantizaba que sus neumáticos traseros izquierdos aguantasen toda la prueba, han sido convocados para declarar el miércoles de la semana que viene ante el Consejo Mundial de la FIA.
El Gran Premio de Estados Unidos se disputó el domingo con sólo tres equipos (seis monoplazas) en pista, los que utilizan neumáticos de la marca japonesa Bridgestone: Ferrari, Jordan y Minardi. El resto volvió a boxes nada más completar la vuelta de formación.