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PRINCIPAL NOVEDAD DE UN PLAN QUE ALARGA PLAZOS

Zapatero creará una sociedad para canalizar la aportación privada al Plan de Infraestructuras

El Gobierno creará la Sociedad de Infraestructuras de Transporte con una aportación inicial de 500 millones de euros y con el objetivo de canalizar la participación de capital privado en la construcción de las carreteras y líneas ferroviarias que incluya el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transportes (PEIT). Esta es la principal novedad de plan. El nuevo PEIT extiende hasta el 2020 obras comprometidas para los próximos años e incluye nuevas obras y modificación de algunas infraestructuras ferroviarias.

El Gobierno creará la Sociedad de Infraestructuras de Transporte con una aportación inicial de 500 millones de euros y con el objetivo de canalizar la participación de capital privado en la construcción de las carreteras y líneas ferroviarias que incluya el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transportes (PEIT). Esta es la principal novedad de plan. El nuevo PEIT extiende hasta el 2020 obras comprometidas para los próximos años e incluye nuevas obras y modificación de algunas infraestructuras ferroviarias.
L D (Agencias) Así lo anunció este lunes el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, durante la presentación del plan, que con una dotación final de 248.892 millones de euros y un periodo de ejecución hasta 2020 constituirá "el mayor esfuerzo en dotación de infraestructuras hecho nunca en España".
 
El jefe del Ejecutivo destacó que el desarrollo del plan redundará en la creación de 150.000 puestos de trabajo directos y una vez que concluya elevará en un 4% la dotación de capital del Estado y aportará 1,3 puntos porcentuales adicionales al PIB. Entre los objetivos del PEIT, Rodríguez Zapatero destacó el desarrollo de la red ferroviaria de alta velocidad, que se multiplicará por diez, y la construcción de 6.000 nuevos kilómetros de carretera de alta capacidad cuya red alcanzará los 15.000 kilómetros en 2020.
 
El jefe del Ejecutivo explicó que las inversiones para el PEIT supondrán, en los próximos quince años, el 15 por ciento del producto interior bruto (PIB) y requerirán de un modelo "diversificado de financiación", con un "fuerte soporte" de los presupuestos del Estado y también con la colaboración pública y privada. Fuentes del Ministerio de Fomento explicaron que se mantiene la previsión inicial de financiación del PEIT basada en un 60 por ciento a través de los presupuestos y el 40 por ciento restante entre capital público y privado. Las infraestructuras planeadas apuestan, según Zapatero, por la "cohesión social y territorial" y prestan atención "singularizada" a los territorios no peninsulares y a las zonas con "mayores dificultades, especialmente el oeste de España". Al ferrocarril se destinarán casi el 50 por ciento de las inversiones, si se incluyen las actuaciones urbanas, y el proyecto definitivo prevé una inversión en la red de altas prestaciones -alta velocidad, tráfico mixto, doble vía electrificada y ancho internacional- de 83.450 millones de euros, (33,5% del total).

Esto supondrá multiplicar por diez, de 1.000 a 10.000 kilómetros, la red de altas prestaciones, así como que el 90 por ciento de los ciudadanos esté a menos de 50 kilómetros de una estación de la citada red, según aseguró Zapatero. También se prevé una inversión de 3.560 millones en supresión o mejora de los pasos a nivel. Zapatero explicó también que se pretende lograr la "interoperabilidad" de la red ferroviaria convencional y adaptarla a la europea, "recuperando así un largo tiempo históricamente paralizado". En cuanto a las carreteras, se pretende pasar de 9.000 a 15.000 kilómetros en la red estatal de autovías y autopistas, para que el 94 por ciento de la población esté a menos de 30 kilómetros de alguna de ellas.

Tras recordar que el PEIT busca reducir la actual congestión del transporte en carretera, Zapatero también citó las inversiones aeroportuarias, que deberán adaptar una red que verá duplicada su capacidad de absorción de tráfico en 2020, y las portuarias, con el aumento del 75 por ciento de la capacidad de los puertos. Según el presidente del Gobierno, el PEIT será, junto con el Programa Ingenio 2010 y las políticas sociales, uno de los "grandes ejes" de la actuación de su Gobierno, y supone un plan que España "se puede permitir" y "debe afrontar".

El Plan también supondrá, según los cálculos del Gobierno, un aumento de la dotación de capital de cerca del 4 por ciento hasta 2020 y al final del periodo de ejecución habrá contribuido en el aumento del PIB en un 4,3 por ciento. Por su parte, la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, destacó en este acto, ante unos 200 representantes sindicales y empresariales del sector de infraestructuras, que el PEIT definitivo se ha logrado tras un año de "trabajo, reflexión y debate", con la colaboración y coordinación con las distintas administraciones.
 
El presidente de las concesionarias de Autopistas, José Luis Feito, advirtió  de que habrá que subir "intensamente" los impuestos o recurrir a la financiación privada para ejecutar el Plan de Infraestructuras de Transporte (PEIT), que a su juicio continúa con un modelo que ha "descoyuntado" el país.Feito, presidente de la Asociación de Sociedades Españolas Concesionarias de Autopistas (ASETA), aludió al Plan Estratégico de Infraestructuras de Transporte (PEIT) en una rueda de prensa en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), donde defendió el peaje como sistema para racionalizar los recursos y construir y mantener las vías de alta capacidad.

El presidente de ASETA criticó que este plan no reconsidere la política de infraestructuras desarrollada en los últimos quince años, basada en las autovías y en trenes de alta velocidad "por doquier", y subrayó que ese modelo tradicional ha generado un país "descoyuntado", donde unos españoles pagan por circular y otros no. Aseguró que "lo más interesante" de este plan, que planifica las infraestructuras de los próximos veinte años, será ver cómo se financia.

En su opinión, en lo inmediato no planteará problemas, porque el Gobierno va a seguir recibiendo fondos comunitarios en los próximos cinco o seis años, pero después, advirtió, habrá que elegir entre subir los impuestos "intensamente" u optar por la financiación privada. "Me temo que la realidad presupuestaria de los próximos años hará recurrir al peaje", dijo Feito, quien subrayó que la reducción de fondos comunitarios "es una razón adicional para augurar que será muy difícil contar en los próximos cinco o seis años con la holgura presupuestaria necesaria para construir y mantener las infraestructuras".

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