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Prodi gana las primarias de la coalición de centro izquierda y será el candidato de la "Unión"

El líder de la coalición de centro izquierda "Unión", Romano Prodi, fue elegido candidato a la presidencia del Gobierno en los comicios generales de 2006 en las elecciones primarias celebradas este domingo. El presidente del Gobierno, Silvio Berlusconi, que será el contrincante de Prodi, afirmó que la única manera que tiene el ex presidente de la Comisión Europea de ganar "es así, haciendo que voten sólo los electores del centro izquierda".

El líder de la coalición de centro izquierda "Unión", Romano Prodi, fue elegido candidato a la presidencia del Gobierno en los comicios generales de 2006 en las elecciones primarias celebradas este domingo. El presidente del Gobierno, Silvio Berlusconi, que será el contrincante de Prodi, afirmó que la única manera que tiene el ex presidente de la Comisión Europea de ganar "es así, haciendo que voten sólo los electores del centro izquierda".
L D (EFE) Prodi, de 66 años, había logrado el 73,5 por ciento de los votos al 92 por ciento del escrutinio, mientras que el líder del Partido Refundación Comunista, Fausto Bertinotti, su más directo competidor, había obtenido el 15,4 por ciento de los votos, y Clemente Mastella, líder del minúsculo partido centrista democristiano UDEUR, el 4,6 por ciento.
 
Nada más conocer los resultados, que suponen un plebiscito para Prodi, el ex presidente de la Comisión Europa y ex presidente del Gobierno italiano, dijo que trabajará por un nuevo "Olivo", la coalición de centro izquierda que fundó y con la que llevó a la izquierda italiana al poder en 1996. También dijo que los resultados son la respuesta a la arrogancia del centro derecha en el poder.
 
Bertinotti, por su parte, dijo que son la respuesta del pueblo italiano a la derecha en el poder y pidió que el programa electoral lo haga todo "el pueblo de la Unión". La respuesta no se hizo esperar y los líderes de la Unión aseguraron que la victoria es el "antipasto" (entrantes) de los comicios de la primavera próxima.
 
En estas primarias, la primera vez que se celebran en Italia, votaron cuatro millones de ciudadanos en las casi 10.000 mesas distribuidas por todo el país, según los datos facilitados por el dirigente del partido Democráticos de Izquierdas (DS, ex comunista, el más importante de la coalición), Vanni Chiti. Esa cifra, según precisó Chiti, superó con creces las expectativas de la Unión, que daba como "éxito" la consulta si votaban entre 500.000 y 750.000 italianos.
 
Además de Prodi, Bertinotti y Mastella también se presentaron Antonio Di Pietro, el ex fiscal anticorrupción de la Operación Manos Limpias que propició la desaparición del viejo sistema de poder y actual líder del partido Italia de los Valores; el verde Alfonso Pecoraro Scanio y la representante de los grupos antiglobalización Simona Panzino y el financiero independiente Ivan Scafarotto. Di Pietro logró el 3,4 por ciento de los votos, Pecoraro Scanio el 2,1 por ciento, Scalfarotto el 0,6 por ciento y Panzino el 0,5 por ciento.
 
La amplia victoria de Prodi le refuerza como el líder indiscutible del centro izquierda y le da más libertad de movimiento para preparar el programa electoral. Asimismo, los resultados también han servido para medir las fuerzas dentro de la Unión y ver el peso que tenía, sobre todo, Bertinotti, ya que de haber logrado muchos consensos el veterano líder comunista ortodoxo podría condicionar el programa de Prodi. Bertinotti es un viejo aliado de Prodi que ya le hizo caer cuando era presidente de Gobierno en 1998, al retirarle su confianza a "Il Professore", como es conocido Prodi.
 
Estas primarias se vieron sacudidas por el asesinato del vicepresidente del Consejo Regional de Calabria, el dirigente del centro izquierda Francesco Fortugno, ocurrido a media tarde del domingo en Locri, sur de Italia. Dos encapuchados le dispararon cinco tiros mientras votaba en una sede electoral de la Unión. Aunque no se descarta ninguna pista, la que cobra más peso es la mafiosa. En Locri tiene una fuerte presencia la mafia calabresa, la Ndrangheta. Fortugno, de 54 años, casado y con dos hijos, era médico cirujano y forense. Sobre él no pesa ninguna investigación ni sospechas de eventuales relaciones con la criminalidad organizada.
 
Nada más conocerse el atentado, todas las fuerzas políticas lo condenaron. El ministro de Agricultura, Gianni Alemanno, lo consideró un "episodio grave e inquietante". El presidente de la región de Calabria, Agazio Loiero, denunció que se han superado los "niveles de seguridad", lo poco que vale la vida de un hombre en su región y que se está "atentado contra la democracia". Loiero denunció las reiteradas amenazas e intimidaciones por parte de la Ndrangheta a los alcaldes de la región y agregó que "la mafia ha levantado el punto de mira".
 
 
 

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