L D (EFE) En rueda de prensa, el jefe del Area de Contaminación Marítima de la Dirección de Marina Mercante del Ministerio de Fomento, Javier Villanueva, manifestó que desde el inicio de las operaciones "ha habido una mejora notable en cuanto a las condiciones del vertido". Asimismo, indicó que el último reconocimiento aéreo, realizado esta tarde, confirma que "la contaminación ha disminuido de manera notable en la mar, donde ya no se observan restos de crudo, y que las pequeñas manchas que quedan próximas a la costa son de poca consistencia y están desapareciendo poco a poco".
En esta misma línea, el director del Servicio de Emergencias 112 en Huelva, Francisco Huelva, precisó que "desde los helicópteros se observa que la mar de la costa de Huelva está limpia casi en su totalidad, salvo alguna pequeña mancha aceitosa muy leve". Además, informó de que desde que se produjera la emergencia tan sólo se han visto afectados por el vertido dos puntos de la costa onubense, un kilómetro de la playa de Nueva Umbría y una pequeña zona del Caño de la Culata, en Cartaya (Huelva), que "quedarán completamente limpias mañana al mediodía".
Además, el presidente andaluz, Manuel Chaves, lanzó un mensaje de tranquilidad asegurando que el vertido estaba "perfectamente controlado" gracias a que "se están poniendo y se han puesto prácticamente todos los medios necesarios" y que "no es grave". Por su parte, la consejera andaluza de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, puso de manifiesto que las consecuencias ecológicas que puede producir este derrame de petróleo en Huelva serán "mínimas" porque "ha sido un fuel muy fluido que apenas ha costado trabajo rescatarlo de la arena de la playa". El delegado del Gobierno de la Junta en Huelva, Justo Mañas, señaló que por el momento "no se tiene constancia de que el vertido haya afectado a la flora o a la fauna de la zona".
El vertido se produjo a alrededor de las 21:30 horas del pasado miércoles cuando se estaba descargando crudo del petrolero Almoraima procedente de Portugal en una monoboya de la Refinería La Rábida perteneciente a Cepsa. Según las estimaciones realizadas por la compañía son alrededor de 600 metros cúbicos de petróleo la cantidad vertida al mar y una vez que la empresa activó su propio plan de emergencias de terminales marítimos y comunicó a las autoridades competentes (Autoridad Portuaria, Capitanía Marítima y CECEM) lo ocurrido, se activó el Plan Nacional de Contingencias del Estado y el Plan Estratégico Territorial de Emergencias de la Junta de Andalucía.
En esta misma línea, el director del Servicio de Emergencias 112 en Huelva, Francisco Huelva, precisó que "desde los helicópteros se observa que la mar de la costa de Huelva está limpia casi en su totalidad, salvo alguna pequeña mancha aceitosa muy leve". Además, informó de que desde que se produjera la emergencia tan sólo se han visto afectados por el vertido dos puntos de la costa onubense, un kilómetro de la playa de Nueva Umbría y una pequeña zona del Caño de la Culata, en Cartaya (Huelva), que "quedarán completamente limpias mañana al mediodía".
Además, el presidente andaluz, Manuel Chaves, lanzó un mensaje de tranquilidad asegurando que el vertido estaba "perfectamente controlado" gracias a que "se están poniendo y se han puesto prácticamente todos los medios necesarios" y que "no es grave". Por su parte, la consejera andaluza de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, puso de manifiesto que las consecuencias ecológicas que puede producir este derrame de petróleo en Huelva serán "mínimas" porque "ha sido un fuel muy fluido que apenas ha costado trabajo rescatarlo de la arena de la playa". El delegado del Gobierno de la Junta en Huelva, Justo Mañas, señaló que por el momento "no se tiene constancia de que el vertido haya afectado a la flora o a la fauna de la zona".
El vertido se produjo a alrededor de las 21:30 horas del pasado miércoles cuando se estaba descargando crudo del petrolero Almoraima procedente de Portugal en una monoboya de la Refinería La Rábida perteneciente a Cepsa. Según las estimaciones realizadas por la compañía son alrededor de 600 metros cúbicos de petróleo la cantidad vertida al mar y una vez que la empresa activó su propio plan de emergencias de terminales marítimos y comunicó a las autoridades competentes (Autoridad Portuaria, Capitanía Marítima y CECEM) lo ocurrido, se activó el Plan Nacional de Contingencias del Estado y el Plan Estratégico Territorial de Emergencias de la Junta de Andalucía.