L D (EFE) El esprinter español, que logra la tercera victoria en sus diferentes participaciones en la challenge mallorquina, ha invertido en los cien primeros kilómetros de la carrera un tiempo dos horas, nueve minutos y 17 segundos. Tras él, llegaban el suizo Martín Elmiger y el alemán Heinrich Haussler, que daban tiempo a un pelotón en el que estaban la totalidad de los 180 corredores que iniciaron la prueba.
Un pelotón muy numeroso en el que había muchos ilustres como el italiano Paolo Bettini (campeón olímpico) y los españoles Óscar Freire, tres veces campeón del mundo y que volvía a la competición después ocho meses debido a una lesión, y Alejandro Valverde, la nueva joya del ciclismo español y compañero de Gálvez y vencedor en la pasada edición.
La etapa, que servía para levantar el telón de la campaña española, ha sido un calco de lo sucedido en años anteriores y prueba de ello es que terminaba resolviéndose con un esprint, aunque menos apretado que en otras ocasiones. Gálvez ha sido el gran triunfador, pero los animadores de la carrera fueron corredores de los nuevos equipos en el pelotón español casos de los grupos Tres Molinos Resort y Nicolás Mateo, y otros que, aunque no están en la lista de equipos ProTour, como el Relax Gam, Kaiku, Comunidad Valenciana y Andalucía Paul Versan, se encargaron de acaparar el protagonismo en la totalidad de las diez vueltas que tenían que dar al circuito del paseo marítimo de Palma.
La escapada del día la protagonizaron Israel Núñez (Kaiku) y Víctor Hernández (Nicolás Mateo), pues se fueron en la segunda vuelta y llegaron a tener hasta casi tres minutos de ventaja para ser neutralizados a unos quince kilómetros de la línea de meta. Una fuga consentida, pues los equipos con esprinters, especialmente el Illes Balears, controlaron la situación sin mayores agobios tensando la carrera en los momentos claves, tirones que dejaban a varios de los ilustres a cola del pelotón, pues era el lugar más cómodo para evitar las caídas y por ello que Valverde, en muchas de las vueltas, era el encargado de cerrar el grupo.
En el tramo final de la etapa, los compañeros de Gálvez no dudaron en asumir la responsabilidad y marcar el ritmo que más les convenía, pero su trabajo a punto estuvo de irse al traste al producirse un corte en el último giro que enfilaba la larga recta para la meta final. Se produjo un pequeño corte que desbarató el buen hacer de varios equipos, pero no el del Illes Balears, pues Gálvez sacó a relucir su experiencia y punta de velocidad para llevarse la victoria con más facilidad de lo esperado.
Este lunes se disputará la segunda etapa, que unirá las localidades de Cala Millor y Cala Bona tras 159,4 kilómetros de viaje y los altos de Espinagar y Son Tovell, ambos catalogados de cuarta categoría.
Un pelotón muy numeroso en el que había muchos ilustres como el italiano Paolo Bettini (campeón olímpico) y los españoles Óscar Freire, tres veces campeón del mundo y que volvía a la competición después ocho meses debido a una lesión, y Alejandro Valverde, la nueva joya del ciclismo español y compañero de Gálvez y vencedor en la pasada edición.
La etapa, que servía para levantar el telón de la campaña española, ha sido un calco de lo sucedido en años anteriores y prueba de ello es que terminaba resolviéndose con un esprint, aunque menos apretado que en otras ocasiones. Gálvez ha sido el gran triunfador, pero los animadores de la carrera fueron corredores de los nuevos equipos en el pelotón español casos de los grupos Tres Molinos Resort y Nicolás Mateo, y otros que, aunque no están en la lista de equipos ProTour, como el Relax Gam, Kaiku, Comunidad Valenciana y Andalucía Paul Versan, se encargaron de acaparar el protagonismo en la totalidad de las diez vueltas que tenían que dar al circuito del paseo marítimo de Palma.
La escapada del día la protagonizaron Israel Núñez (Kaiku) y Víctor Hernández (Nicolás Mateo), pues se fueron en la segunda vuelta y llegaron a tener hasta casi tres minutos de ventaja para ser neutralizados a unos quince kilómetros de la línea de meta. Una fuga consentida, pues los equipos con esprinters, especialmente el Illes Balears, controlaron la situación sin mayores agobios tensando la carrera en los momentos claves, tirones que dejaban a varios de los ilustres a cola del pelotón, pues era el lugar más cómodo para evitar las caídas y por ello que Valverde, en muchas de las vueltas, era el encargado de cerrar el grupo.
En el tramo final de la etapa, los compañeros de Gálvez no dudaron en asumir la responsabilidad y marcar el ritmo que más les convenía, pero su trabajo a punto estuvo de irse al traste al producirse un corte en el último giro que enfilaba la larga recta para la meta final. Se produjo un pequeño corte que desbarató el buen hacer de varios equipos, pero no el del Illes Balears, pues Gálvez sacó a relucir su experiencia y punta de velocidad para llevarse la victoria con más facilidad de lo esperado.
Este lunes se disputará la segunda etapa, que unirá las localidades de Cala Millor y Cala Bona tras 159,4 kilómetros de viaje y los altos de Espinagar y Son Tovell, ambos catalogados de cuarta categoría.