LD (EFE) La cumbre de líderes de la UE acordó el pasado fin de semana el marco presupuestario para 2007-21013, pero también una reforma a fondo del presupuesto de la Unión, y algunos dirigentes han comenzado a volver a retomar la idea, ya planteada por la Comisión Europea el año pasado.
El objetivo de un impuesto europeo sería establecer un método de generación de recursos y evitar las amargas disputas que se producen cada siete años entre los Estados miembros acerca de cuánto pone y cuánto saca cada uno en la dura discusión del marco presupuestario.
"Es algo que la Comisión podría mirar", dijo este martes el primer ministro británico, Tony Blair , acerca de la revisión que el Ejecutivo comunitario va a hacer de la estructura presupuestaria durante 2008-2009. Blair, quien fue preguntado expresamente por esa posibilidad durante una conferencia de prensa tras el primer debate en el Parlamento Europeo sobre el presupuesto, no rechazó abiertamente la idea, aunque recordó que tradicionalmente se ha opuesto a ella.
"Sea cual sea el método que se decida, hay que recaudar el dinero. La cuestión es cuál es la mejor forma de recaudar el dinero", dijo Blair, aunque a continuación señaló que "nunca hemos estado a favor de impuestos europeos". Por su parte, el presidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell , quien participó en la misma conferencia de prensa, se manifestó de forma cauta a favor de la idea. "Quizás sería una cosa positiva establecer un vínculo directo entre el gasto europeo y los contribuyentes europeos", sugirió Borrell.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso , aludió de forma indirecta a esa posibilidad al señalar, el lunes, la necesidad de que la Unión evite los duros debates entre países beneficiarios o perjudicados que se producen cada siete años, cuando se elaboran los presupuestos. "Tenemos que encontrar la forma de evitar un vínculo tan directo entre los presupuestos nacionales y el presupuesto europeo", señaló Barroso durante la conferencia de prensa en la que analizó los resultados de la cumbre. El responsable del Ejecutivo comunitario dijo que la revisión se hará "sin tabúes y sin límites", a fin de encontrar "algo más racional, porque esta negociación ha confirmado la insatisfacción sobre la estructura y el método" de elaboración del presupuesto, que "no son buenos para Europa".
La anterior Comisión Europea, presidida por Romano Prodi, ya planteó la posibilidad de establecer en 2014, cuando concluya el próximo período presupuestario, un nuevo sistema de financiación de la UE basado en que Bruselas recaudara algún tipo de impuesto. Sin embargo, la idea no generó apenas entusiasmo entre los países miembros, y algunos estados se opusieron frontalmente.
El objetivo de un impuesto europeo sería establecer un método de generación de recursos y evitar las amargas disputas que se producen cada siete años entre los Estados miembros acerca de cuánto pone y cuánto saca cada uno en la dura discusión del marco presupuestario.
"Es algo que la Comisión podría mirar", dijo este martes el primer ministro británico, Tony Blair , acerca de la revisión que el Ejecutivo comunitario va a hacer de la estructura presupuestaria durante 2008-2009. Blair, quien fue preguntado expresamente por esa posibilidad durante una conferencia de prensa tras el primer debate en el Parlamento Europeo sobre el presupuesto, no rechazó abiertamente la idea, aunque recordó que tradicionalmente se ha opuesto a ella.
"Sea cual sea el método que se decida, hay que recaudar el dinero. La cuestión es cuál es la mejor forma de recaudar el dinero", dijo Blair, aunque a continuación señaló que "nunca hemos estado a favor de impuestos europeos". Por su parte, el presidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell , quien participó en la misma conferencia de prensa, se manifestó de forma cauta a favor de la idea. "Quizás sería una cosa positiva establecer un vínculo directo entre el gasto europeo y los contribuyentes europeos", sugirió Borrell.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso , aludió de forma indirecta a esa posibilidad al señalar, el lunes, la necesidad de que la Unión evite los duros debates entre países beneficiarios o perjudicados que se producen cada siete años, cuando se elaboran los presupuestos. "Tenemos que encontrar la forma de evitar un vínculo tan directo entre los presupuestos nacionales y el presupuesto europeo", señaló Barroso durante la conferencia de prensa en la que analizó los resultados de la cumbre. El responsable del Ejecutivo comunitario dijo que la revisión se hará "sin tabúes y sin límites", a fin de encontrar "algo más racional, porque esta negociación ha confirmado la insatisfacción sobre la estructura y el método" de elaboración del presupuesto, que "no son buenos para Europa".
La anterior Comisión Europea, presidida por Romano Prodi, ya planteó la posibilidad de establecer en 2014, cuando concluya el próximo período presupuestario, un nuevo sistema de financiación de la UE basado en que Bruselas recaudara algún tipo de impuesto. Sin embargo, la idea no generó apenas entusiasmo entre los países miembros, y algunos estados se opusieron frontalmente.