LD (EFE) Soldados australianos y neocelandeses han registrado uno a uno a los más de cinco mil partidarios de Mari Alkatiri, el dimisionario ex primer ministro de Timor Oriental. Su objetivo era llegar al Palacio de las Ciencias, sede de la presidencia, para entregar un documento al presidente, Xanana Gusmao, pidiéndole que anule la dimisión de Alkatiri.
Soldados australianos y neozelandeses registran uno a uno a los seguidores del Fretilin, partido que lidera Alkatiri y es mayoría en el Parlamento, para asegurarse de que acuden a la ciudad desarmados. La caravana no consiguió ese objetivo al ser conminada a desviarse de su rumbo por las fuerzas australianas y neozelandesas desplegadas en Dili para restaurar el orden.
Alkatiri dimitió el lunes bajo la presión de grandes segmentos de la población que le responsabilizan de la ola de violencia que se apoderó de Dili en mayo y causó treinta muertes y el abandono de sus hogares de unas cien mil personas que aun permanecen internadas en campos de refugiados de la capital. El origen de la espiral violenta fue la expulsión del Ejército de seiscientos soldados que exigían el fin de la discriminación étnica en la institución.