L D (EFE) Los entrenamientos del Gran Premio de Gran Bretaña realizados este fin de semana en el circuito de Donington Park no han podido ser más favorables para las aspiraciones españolas, pues sus tres protagonistas han dominado con "mano de hierro" una situación que casi en todo momento les resultó favorable y ello les ha permitido copar las primeras posiciones en todas las cilindradas. Quien menos diferencia sacó en la tabla de tiempos fue Alvaro Bautista (Aprilia), que precisamente es el líder destacado en la clasificación provisional del mundial de 125 c.c., pero por lo que se refiere a Daniel Pedrosa y Jorge Lorenzo, las diferencias que marcaron respecto a sus rivales acabaron siendo hasta cierto punto desesperantes.
Bautista domina con firmeza la clasificación del octavo de litro y sólo en una ocasión se ha quedado fuera del podio -Francia-, mientras que ha logrado hasta la fecha tres victorias y tiene una ventaja respecto a su inmediato perseguidor, el finlandés Mika Kallio (KTM), de cuarenta y siete puntos. En su caso no hubo lugar a la duda, desde el primero hasta el último entrenamiento él fue el más rápido de todos los participantes, casi siempre secundado por quien se perfila como su único rival en la lucha por el título, el propio piloto finés.
Algo semejante ocurrió en los 250 c.c., en donde Jorge Lorenzo, salvo en uno de los libres, en el que le superó Andrea Dovizioso, siempre mandó en la clasificación por tiempos, pero en su caso la necesidad de ganar es más apremiante, pues el piloto italiano cuenta con una ventaja por puntos que necesita reducir de manera eficaz el piloto mallorquín. Aún así, la madurez evidenciada por Jorge Lorenzo en las últimas carreras permite pensar que no cometerá ningún error de precipitación que dé al traste con el buen trabajo realizado en los entrenamientos y que, en condiciones normales le debiera permitir escaparse fácilmente de sus rivales en pos de la victoria.
Tal como a Lorenzo le acabó sucediendo a Daniel Pedrosa, que marcó la pauta casi siempre, salvo en una ocasión en que lo hizo el australiano Casey Stoner (Honda RC 211 V), pero cuando llegó el momento de la verdad en la única tanda oficial de entrenamientos el español destapó el tarro de las esencias e impuso un ritmo inalcanzable para todos sus rivales, incluido el propio Valentino Rossi, quien mañana deberá esforzarse al máximo sobre su Yamaha YZR M 1 si no quiere perder "comba" en la lucha por el título mundial que ahora ostenta.