L D (EFE) El Instituto Nacional de Meteorología prevé para este lunes una subida térmica moderada en el Cantábrico y Alto Ebro, que será ligera en Castilla y León y sin cambios en el resto, con temperaturas significativamente altas en Gerona, Canarias y Baleares, especialmente en Mallorca. El caso conocido hoy se localiza en otra de las islas Baleares, en Menorca, donde un hombre de 52 años murió en el hospital Verge del Toro tras haber sufrido un golpe de calor mientras trabajaba como albañil, informaron fuentes del centro sanitario. A.S.R., que murió en la madrugada de ayer, había ingresado en el hospital la tarde anterior, después de sentirse mal y perder el conocimiento mientras trabajaba en una obra en Es Migjorn, donde sufrió el colapso.
Esta es la segunda persona que sufre un golpe de calor de consecuencias graves en Menorca, la primera fue otro varón que padeció un fallo multiorgánico mientras iba en bicicleta a pleno sol hace una semana y que está ingresado, en estado grave, en el mismo centro. Ayer, un indigente murió mientras dormía, sobre las 15.00 horas, en un banco en una calle de Valencia, donde los termómetros alcanzaron los 33 grados.
El cuerpo de P.P.I, de 60 años, no tenía signos de violencia y la la Policía no ha confirmado si la muerte fue por un golpe de calor, ya que todavía no se conocen los resultados de la autopsia. El día 21, la Policía encontró también en Valencia el cadáver de un hombre de 71 años en la terraza de su vivienda, donde, al parecer, murió como consecuencia de una insolación mientras tomaba el sol, ya que se quedó dormido. Las altas temperaturas podrían ser también la causa de la muerte de una mujer de 66 años, con varias enfermedades y antecedentes de dolencias cardiacas, que murió también el día 21 de un paro cardíaco provocado, al parecer por un golpe de calor, cuando tomaba el sol en una playa de Sitges, Barcelona.
En Andalucía, un hombre de 37 años que sufrió un golpe de calor cuando trabajaba en un invernadero de Las Norias (Almería) falleció también el día 21 en la UCI del Hospital de Poniente. En ese día se conoció que en el hospital sevillano de Virgen de la Macarena había fallecido un varón de 53 año el pasado 18 de julio, después de haber realizado un fuerte ejercicio físico en las horas centrales del día, a consecuencia de lo cual quedó inconsciente.
El cuerpo de P.P.I, de 60 años, no tenía signos de violencia y la la Policía no ha confirmado si la muerte fue por un golpe de calor, ya que todavía no se conocen los resultados de la autopsia. El día 21, la Policía encontró también en Valencia el cadáver de un hombre de 71 años en la terraza de su vivienda, donde, al parecer, murió como consecuencia de una insolación mientras tomaba el sol, ya que se quedó dormido. Las altas temperaturas podrían ser también la causa de la muerte de una mujer de 66 años, con varias enfermedades y antecedentes de dolencias cardiacas, que murió también el día 21 de un paro cardíaco provocado, al parecer por un golpe de calor, cuando tomaba el sol en una playa de Sitges, Barcelona.
En Andalucía, un hombre de 37 años que sufrió un golpe de calor cuando trabajaba en un invernadero de Las Norias (Almería) falleció también el día 21 en la UCI del Hospital de Poniente. En ese día se conoció que en el hospital sevillano de Virgen de la Macarena había fallecido un varón de 53 año el pasado 18 de julio, después de haber realizado un fuerte ejercicio físico en las horas centrales del día, a consecuencia de lo cual quedó inconsciente.
Durante el verano del 2005 fallecieron nueve personas
La primera víctima conocida, asociada a la subida de las temperaturas, se registró el pasado 15 de julio, cuando falleció en Murcia un albañil de 53 años que había estado toda la tarde anterior trabajando a pleno sol. Dos días después, murió un hombre de 44 años tras sufrir una parada cardiorrespiratoria cuando trabajaba en una obra de una construcción deportiva en el municipio de Toén (Orense). El 19 de julio, un hombre de 32 años, natural y vecino de Talayuela (Cáceres), perdió la vida a consecuencia de un golpe de calor, unido a otras patologías, cuando trabajaba en una finca de la localidad.
En el verano de 2005 fueron nueve las personas que murieron por esta causa y en el de 2004 se registraron 26 víctimas mortales. El golpe de calor es la elevación de la temperatura corporal por encima de los 39 y 40 grados, durante periodos de 10 a 15 minutos, lo que puede causar un colapso cardiorrespiratorio y el fracaso de la función de varios órganos.
Algunos de los síntomas más importantes son mareo, confusión, sudoración excesiva con posterior falta de calor, enrojecimiento, sequedad de la piel, fiebre, aceleración del ritmo cardíaco con latido débil y dolor de cabeza. Ante su aparición, se debe solicitar asistencia médica urgente y, mientras ésta llega, colocar al afectado en un entorno fresco y enfriarla con aire o agua fría.
Las autoridades sanitarias y Protección Civil insisten en la importancia de evitar la exposición a altas temperaturas, resguardarse en lugares bien ventilados y tomar comidas ligeras y regulares ricas en agua y sales minerales. Piden que se vista con ropas de color claro, que cubran la mayor parte del cuerpo, especialmente la cabeza, y evitar permanecer en vehículos cerrados, principalmente si son personas mayores y niños.