LD (Agencias) Tras reunirse con el presidente de Siria, Bachar al-Aasad, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, aseguró que las autoridades de Damasco se han comprometido en tomar "todas las medidas necesarias" para hacer cumplir el embargo de armas a Hezbolá. Concretamente, destacó, en los próximos días en la frontera se incrementarán las patrullas conjuntas con el Ejército libanés.
Annan subrayó que Al-Bachar también le ratificó que trabajará para aplicar la resolución 1.701 del Consejo de Seguridad de la ONU y se comprometió a utilizar su influencia sobre Hezbolá para liberar a los dos soldados israelíes que el grupo terrorista mantiene secuestrados desde el doce de julio. Ambos dirigentes han analizado, además, la situación que prevalece en torno a las granjas de Cheba, territorio ocupado por Israel en 1967, que Siria y Líbano consideran perteneciente a Líbano y la ONU e Israel como parte del territorio sirio.
Este jueves durante su visita a Jordania, Annan pedía a Israel que levantara el bloqueo aéreo y terrestre impuesto contra el Líbano porque podría interpretarse por la comunidad internacional como un "castigo colectivo". El secretario consideró "importante que (el embargo) se levante y que no sea visto como un castigo colectivo del pueblo libanés, ya que Israel ha dicho que no tiene ninguna clase de problema con los ciudadanos. Pero en cualquier caso, creo que el bloqueo no puede permanecer en pie durante mucho tiempo".
Además de criticar nuevamente el empleo por parte de Israel de bombas de racimo durante la guerra abierta contra Hezbolá, Annan expresó su deseo de que el acuerdo de alto el fuego adquiriera tintes más permanentes. Afirmó que "creo que ese tipo de armas no deberían emplearse en las zonas con población civil, y estamos trabajando muy duro a través de nuestra unidad de desactivación de minas para limpiar las áreas lo más rápidamente posible".