(Libertad Digital) El pasado 14 de septiembre Lavandera denunció a los dos periodistas que firmaban una información de El País, Ekaizer y J.M. Romero, por referirse a él como "delincuente" pese a que el asturiano carece de antecedentes penales. En su denuncia, Lavandera hace hincapié en que nunca ha sido condenado por delito alguno, sin embargo si que tiene señalado un juicio en el que tendrá que responder de una presunta falsificación de una nómina. Ésta, que sería la primera causa pendiente con la Justicia de Lavandera, estaría destinada, en su opinión, a invalidar su testimonio y presentarle como un delincuente.
En su carta, Lavandera explica el desarrollo de este juicio sobre presunta falsificación y lo pone en relación con unas palabras de Trashorras durante un careo ante el juez Del Olmo y la fiscal Olga Sánchez. Asimismo, denuncia la falta de un abogado que pueda asistirle en el desarrollo del juicio y afirma que todo lo que se le está imputando actualmente es mentira.
Carta abierta de Lavandera
”Quiero que sepáis lo siguiente: El próximo martes estoy citado en un juzgado de Avilés por una falsificación que me imputan para así poder acusarme de apropiación indebida por haber comprado un coche que como no pude pagar, devolví al concesionario, que dada mi actitud no me denunció. Este juicio se está desarrollando sin denuncia de parte.
En un careo que se celebró en la Audiencia Nacional ante el juez Juan del Olmo, la fiscal Olga Sánchez, el taquígrafo y dos policías nacionales, Trashorras dijo algo que recuerdo con bastante precisión y que tiene que figurar allí: “te vas a enterar, el juez va a saber que el que falsificó tu nómina me dio la copia de tu DNI y yo se la pasé a la policía para que te detuviesen”.
Esa declaración de Trashorras está en el sumario del 11-M, pero seguramente no estará en la documentación del juicio de Aviles, porque quiero que sepáis el enorme escándalo al que me enfrento, pues voy a ese juicio, montado contra mí por la banda de Trashorras, con la colaboración de los elementos policiales que les apoyan. Y voy totalmente indefenso.
Me colocaron un abogado de oficio al que no conozco de nada, nunca hablé con él. En el juzgado de Gijón, cuando fui a declarar, como no estaba, pregunté por él y me dijeron que “ya se pondría él en contacto conmigo”.
El juicio es el martes, tengo un teléfono de él, el fijo, teléfono que puedo proporcionar a quien lo quiera saber para ayudarme, y no me cogió nunca el teléfono ante mis llamadas.
La prensa me llama delincuente y me imputan cosas totalmente falsas, como que haya denunciado la colocación de una bomba y cosas así. Todo es mentira. Pero ellos pueden llamarme delincuente, y lo hacen con total impunidad. Y sin embargo yo puedo estar totalmente indefenso y a mí nadie me echa una mano, salvo vosotros, la gente de la calle que sabéis lo que hay, lo que pasó, y cómo me están acosando.
No le deseo a nadie este infierno, y pido a Dios que castigue a estos desalmados por lo que están haciendo, y digo a Dios, porque los hombres, los seres humanos no tienen justicia, por lo menos en España, y prefiero creer que hay algo superior que les hará pagar por todo lo que están haciendo”.
En un careo que se celebró en la Audiencia Nacional ante el juez Juan del Olmo, la fiscal Olga Sánchez, el taquígrafo y dos policías nacionales, Trashorras dijo algo que recuerdo con bastante precisión y que tiene que figurar allí: “te vas a enterar, el juez va a saber que el que falsificó tu nómina me dio la copia de tu DNI y yo se la pasé a la policía para que te detuviesen”.
Esa declaración de Trashorras está en el sumario del 11-M, pero seguramente no estará en la documentación del juicio de Aviles, porque quiero que sepáis el enorme escándalo al que me enfrento, pues voy a ese juicio, montado contra mí por la banda de Trashorras, con la colaboración de los elementos policiales que les apoyan. Y voy totalmente indefenso.
Me colocaron un abogado de oficio al que no conozco de nada, nunca hablé con él. En el juzgado de Gijón, cuando fui a declarar, como no estaba, pregunté por él y me dijeron que “ya se pondría él en contacto conmigo”.
El juicio es el martes, tengo un teléfono de él, el fijo, teléfono que puedo proporcionar a quien lo quiera saber para ayudarme, y no me cogió nunca el teléfono ante mis llamadas.
La prensa me llama delincuente y me imputan cosas totalmente falsas, como que haya denunciado la colocación de una bomba y cosas así. Todo es mentira. Pero ellos pueden llamarme delincuente, y lo hacen con total impunidad. Y sin embargo yo puedo estar totalmente indefenso y a mí nadie me echa una mano, salvo vosotros, la gente de la calle que sabéis lo que hay, lo que pasó, y cómo me están acosando.
No le deseo a nadie este infierno, y pido a Dios que castigue a estos desalmados por lo que están haciendo, y digo a Dios, porque los hombres, los seres humanos no tienen justicia, por lo menos en España, y prefiero creer que hay algo superior que les hará pagar por todo lo que están haciendo”.