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El Gran Canaria sorprende al Hemofarm Vrsac en la Copa ULEB (73-81)

El Gran Canaria Grupo Dunas se mantiene como invicto en el grupo A de la Copa ULEB al vencer contra todo pronóstico al Hemofarm Vrsac, con un último cuarto de ensueño -31 puntos- que enmudeció al público serbio. La apuesta de Salva Maldonado, técnico del conjunto español, por el base Mario Fernández fue todo un éxito, así como la respuesta de Jim Moran y Víctor Baldo, letal tanto en ataque como en defensa.

L D (EFE) Con todo, unos parciales 7-0 y 9-2 presagiaron mayores dificultades para los españoles. Sin embargo, el cuadro canario no se amilanó por la impetuosa salida de su rival y logró meterse en el partido gracias a un enrabietado Tre Simmons. El alero estadounidense, que será sustituido a partir de este miércoles por su compatriotas Jimmie Hunter, firmó diez minutos de ensueño con un pleno de efectividad en lanzamientos triples -dos-, de dos puntos -dos- y de tiro libres -uno-.

El registro de Simmons, de haberse repetido en los siete partidos oficiales anteriores, quizás hubiera podido prolongar su contrato temporal. Con el parcial 20-11 el Hemofarm buscó romper el choque, pero el conjunto español apretó los dientes, se refugió en el acierto de Simmons, Moran y Savané para avisar de sus intenciones al cuarto de hora: 25-29. Con Simmons en el banquillo, los cinco minutos previos al descanso fueron de calvario para los pupilos Maldonado, quienes sólo pudieron anotar tres puntos ante el festival de Joksimovic (36-32).

En el tercer cuarto, el Gran Canaria perdió solidez en defensa y, para como, en ataque no volvió a disponer de los puntos de Simmons. Sin prisas, pero sin pausas, el conjunto balcánico deleitó a sus incondicionales con acciones del tridente Suput-Joksimovic-Topic, y las rentas de los anfitriones comenzaron a ser claras (50-41). En el minuto 30 la ventaja serbia alcanzó por primera vez los diez puntos (57-47), tras canasta de Radinovic, pero un triple de Moran cerró el cuarto para mantener la esperanza insular de remontada.

Con Mario Fernández como director de juego y Morán como infalible artillero, el Gran Canaria respondió enérgicamente en el último cuarto al triple inicial de Joksimovic (60-50), y se dio un festín ofensivo. Así, cinco minutos de sequía anotadora de los serbios y tres tiros libres convertidos del pívot Víctor Baldo elevaron las dudas de los anfitriones y, también, la ilusión al Gran Canaria, que logró un meritorio parcial 0-16 (60-66). En la recta final del choque el Hemofarm no mejoró y Morán y Baldo exhibieron entonces una eficacia demoledora para firmar un 73-81 de mucha calidad, al ser materializado ante uno de los semifinalistas del certamen continental.

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