L D (EFE) El presidente de Brenntag en España, Emilio Colomer, informó a EFE de que la empresa tiene previsto afrontar los gastos derivados de "las obligaciones legales" ocasionadas por el vertido, y apuntó que la empresa multinacional dispone de pólizas de seguro que cubren ese tipo de accidentes.
Fuentes de la Consejería de Medio Ambiente de la Xunta, por su parte, explicaron a EFE que el departamento ha abierto tres expedientes a la empresa para conocer "la situación administrativa" de la compañía.
Colomer señaló que el seguro de que dispone la empresa está destinado a la "responsabilidad de daños a la compañía, a terceros y los subsidiarios", por lo que consideró que "van a cubrir todo lo necesario", aunque "evidentemente no barbaridades", precisó.
El responsable de Brenntag en España puntualizó que ya ha tenido contacto con la compañía aseguradora para informarle del accidente del pasado viernes, aunque dijo: "Todavía no me he sentado para discutir los detalles".
Indicó que la póliza "cubre los daños" medioambientales ocasionados por el vertido al río Umia de tolueno, xileno y estireno, sustancias químicas que ya han comenzado a ser sometidas a tratamiento con "carbón activo", una sustancia que actúa como "absorbente selectivo" para la depuración de aguas.
Destacó que "no hay ni benceno ni metales pesados" entre los componentes químicos que se desprendieron de la planta a consecuencia del incendio, y apuntó que un total de 40,5 toneladas de carbón activo procedentes de otras plantas de Brenntag en Valencia y Sevilla -donde se encuentra la sede central española- se encuentran ya en Galicia para la limpieza efectiva del río.
Añadió que, además, otras 22 toneladas procedentes de otras plantas de Francia se encuentran en camino y, "si es necesario, se traerá más de Francia, el Reino Unido u otros países".
Indicó que el vertido de los productos químicos obedeció a que durante el incendio "se tardó un poco en el operativo" para disponer las barreras de contención de los productos químicos, lo que añadido al agua arrojada por los bomberos para extinguir las llamas contribuyó a que se extendieran los productos contaminantes.
La portavoz de Brenntag en España, Belén Ruiz, indicó a EFE que la empresa de Caldas de Reis disponía de "todos los permisos legales" para la utilización de sustancia químicas e incluso dispone de "certificaciones" tanto internacionales como europeas, algunas de ellas de carácter voluntario, en materia de control medioambiental.
La empresa, agregó, no ha abierto una investigación interna, porque agentes de la policía judicial ya investigan en la factoría las causas del accidente.
Por su parte, fuentes de la Consellería de Medio Ambiente indicaron a EFE que ese departamento de la Xunta ha abierto tres expedientes para determinar "en qué situación administrativa estaba la empresa" y si cumplía las obligaciones legales.
Los expedientes han sido abiertos por la Dirección General de Conservación de la Naturaleza, por la dirección de la empresa Augas de Galicia y por la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental, precisaron las mismas fuentes.
Añadieron que la Xunta ha enviado a la Fiscalía de Medio Ambiente "toda la información" de que dispone sobre el accidente y el vertido de sustancia tóxicas.
Precisaron que, una vez concluya el proceso de los expedientes, se decidirá si se elevan a la autoridad judicial, en caso de incumplimiento de la normativa vigente.
Fuentes de la Consejería de Medio Ambiente de la Xunta, por su parte, explicaron a EFE que el departamento ha abierto tres expedientes a la empresa para conocer "la situación administrativa" de la compañía.
Colomer señaló que el seguro de que dispone la empresa está destinado a la "responsabilidad de daños a la compañía, a terceros y los subsidiarios", por lo que consideró que "van a cubrir todo lo necesario", aunque "evidentemente no barbaridades", precisó.
El responsable de Brenntag en España puntualizó que ya ha tenido contacto con la compañía aseguradora para informarle del accidente del pasado viernes, aunque dijo: "Todavía no me he sentado para discutir los detalles".
Indicó que la póliza "cubre los daños" medioambientales ocasionados por el vertido al río Umia de tolueno, xileno y estireno, sustancias químicas que ya han comenzado a ser sometidas a tratamiento con "carbón activo", una sustancia que actúa como "absorbente selectivo" para la depuración de aguas.
Destacó que "no hay ni benceno ni metales pesados" entre los componentes químicos que se desprendieron de la planta a consecuencia del incendio, y apuntó que un total de 40,5 toneladas de carbón activo procedentes de otras plantas de Brenntag en Valencia y Sevilla -donde se encuentra la sede central española- se encuentran ya en Galicia para la limpieza efectiva del río.
Añadió que, además, otras 22 toneladas procedentes de otras plantas de Francia se encuentran en camino y, "si es necesario, se traerá más de Francia, el Reino Unido u otros países".
Indicó que el vertido de los productos químicos obedeció a que durante el incendio "se tardó un poco en el operativo" para disponer las barreras de contención de los productos químicos, lo que añadido al agua arrojada por los bomberos para extinguir las llamas contribuyó a que se extendieran los productos contaminantes.
La portavoz de Brenntag en España, Belén Ruiz, indicó a EFE que la empresa de Caldas de Reis disponía de "todos los permisos legales" para la utilización de sustancia químicas e incluso dispone de "certificaciones" tanto internacionales como europeas, algunas de ellas de carácter voluntario, en materia de control medioambiental.
La empresa, agregó, no ha abierto una investigación interna, porque agentes de la policía judicial ya investigan en la factoría las causas del accidente.
Por su parte, fuentes de la Consellería de Medio Ambiente indicaron a EFE que ese departamento de la Xunta ha abierto tres expedientes para determinar "en qué situación administrativa estaba la empresa" y si cumplía las obligaciones legales.
Los expedientes han sido abiertos por la Dirección General de Conservación de la Naturaleza, por la dirección de la empresa Augas de Galicia y por la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental, precisaron las mismas fuentes.
Añadieron que la Xunta ha enviado a la Fiscalía de Medio Ambiente "toda la información" de que dispone sobre el accidente y el vertido de sustancia tóxicas.
Precisaron que, una vez concluya el proceso de los expedientes, se decidirá si se elevan a la autoridad judicial, en caso de incumplimiento de la normativa vigente.