L D (Agencias) El Rey Don Juan Carlos declaró su voluntad de luchar contra el tráfico de seres humanos, de la misma manera que insistió en su "firme compromiso" de promover "el desarrollo económico de los pueblos, combatir la pobreza y trabajar a favor de los derechos humanos".
Estas fueron algunas de las afirmaciones hechas por Su Majestad en el discurso pronunciado antes de la cena ofrecida por el Gobierno de Canarias en su sede de Santa Cruz de Tenerife.
Don Juan Carlos no olvidó agradecer a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, a las Fuerzas Armadas, y al resto de instituciones públicas, la "valiosa labor humanitaria" que desarrollan atendiendo a los inmigrantes que llegan a las costas canarias.
Trabajo hecho, dijo, "con eficacia y generosidad", para afrontar un "fenómeno que, tan a menudo, se presenta en términos dramáticos y frente al que debemos actuar juntos, con rigor y solidaridad". Asimismo, el Monarca animó a superar con éxito este problema, "unidos", avanzando hacia una España cada vez "más moderna, dinámica y solidaria".
El Rey recalcó que Canarias ha sido a lo largo de la historia un puente de unión con "nuestros hermanos de América y nuestros vecinos de África". Y en paralelo, las islas han sabido crecer dentro de España, venciendo dificultades y proyectando su personalidad. Así, en las últimas tres décadas, tal como destacó don Juan Carlos, el archipiélago ha vivido una transformación y un crecimiento que "hemos podido seguir, con profunda satisfacción".
Agregó que, en la actualidad, las islas "poco o nada tienen que ver con aquel territorio, pobre y atrasado, que en 1906, conoció el rey Alfonso XIII". Superadas las lacras del pasado, como la emigración de todos aquellos que partían hacía América buscando un futuro mejor, tras los reveses sufridos en la agricultura, y soslayadas las carencias en las comunicaciones, o el retraso industrial, económico y social, el Monarca aprovechó esta nueva visita para "renovar el compromiso de la Corona con todos los canarios".