LD (EFE) Saparmurat Niyázov, que además de presidente era primer ministro y líder del único partido político legal de Turkmenistán, impuso en su país un culto a la personalidad similar al existente en Corea del Norte, según denuncias de organizaciones humanitarias. Sus retratos adornan todos los edificios públicos y en su honor se han erigido numerosos monumentos, entre ellos una escultura dorada de quince metros de altura en Ashjabad en la que aparece con traje y corbata, pero a caballo y empuñando una espada.
La población de Turkmenistán debe saber de memoria algunas partes del Rujkhnamá (Libro del Alma), escrito por Niyázov y que ha sido traducido a veinte idiomas. Su conocimiento es obligatorio para todos los turkmenos y hasta es uno de los temas en los exámenes de las autoescuelas. El segundo tomo de dicha obra fue presentado en el Parlamento en septiembre de 2004 y leído en voz alta en sesiones plenarias.
Además, para resaltar su valor espiritual para la nación, el noveno mes del año, cuando apareció el libro, en Turkmenistán también se llama Rukhnamá y el sexto día del mes pasó a ser "rukhguiun", que significa día espiritual
Niyázov, que nació el diecinueve de febrero de 1940 en Ashjabad, capital de este país centroasiático, se graduó en 1967 en Física y Matemáticas por el Instituto Politécnico de Leningrado (Rusia) y en 1962 ingresó en el Partido Comunista de la URSS (PCUS). Entre 1967 y 1970 ejerció de capataz en la estación hidroeléctrica de Bezmehinsk, en la región de Ashjabad.
Elegido presidente del Soviet Supremo el diecinueve de enero de 1990, nueve meses después (veintisiete octubre) se situó al frente de la república en unas elecciones por sufragio directo, gracias a una mayoría del 98,3 por ciento de los votos, proclamó la independencia de Turkmenistán e incluyó al país dentro de la Comunidad de Estados Independientes (CEI).
La administración del presidente Niyazov, con una oposición muy reducida, siguió en manos de los oficiales del PCT. En 1991 creó el Partido Democrático de Turkmenistán (PDT), formación liderada por el propio Niyázov y que no era más que el PCT con otro nombre. El veinte de junio de 1992 se presentó a unos comicios presidenciales como único candidato (99,5 por ciento de los votos) y el quince de enero de 1994 hizo aprobar en referéndum, con un apoyo del 99,9 por ciento de los sufragios, la prolongación hasta 2002 de su mandato, que expiraba en 1997.