L D (EFE) En declaraciones a la prensa, Manzanera ha explicado que "no existe coincidencia ni con la instalación, ni con el quirófano, ni con el médico que las ha practicado (las operaciones), ni con el equipo anestesista ni el tipo de diagnóstico", por lo que la única vinculación entre los dos fallecimientos parece ser que en ambos casos se produjeron problemas de coagulación tras la operación. El departamento de Salud corrobora así, según los primeros datos de que dispone, la versión del hospital, que ha negado una mala praxis en la muerte de las dos mujeres y ha descartado que exista "vinculación aparente" entre ambos casos, que se debieron a complicaciones postoperatorias "imprevisibles".
El departamento que dirige Marina Geli ha cerrado de forma cautelar los dos quirófanos del centro hospitalario, si bien Manzanera ha subrayado que "no se puede hablar de negligencia" porque las primeras investigaciones apuntan a que el dispositivo asistencial del hospital para este tipo de intervenciones es "a grandes rasgos muy correcto y adecuado".
El responsable de Recursos Sanitarios ha recordado que todas las intervenciones quirúrgicas implican un riesgo y este tipo de operaciones no son una excepción. "En muchos casos, a pesar de cumplirse todos los criterios médicos, clínicos y científicos, puede haber desenlaces fatales", ha subrayado Manzanera.