Menú

Rajoy y San Gil visitan juntos la capilla ardiente del guardia civil asesinado por ETA

La capilla ardiente del guardia civil Juan Manuel Piñuel Villalón, asesinado por ETA esta madrugada en Legutiano-Villarreal de Álava, ha quedado abierta a las cinco menos cuarto de la tarde en la subdelegación del Gobierno en Álava. Pocos minutos después de la apertura ha llegado la viuda. Zapatero lo ha hecho sobre las 18.00 horas. Tras la salida de Zapatero, llegaron juntos Mariano Rajoy y María San Gil.


Atentado de ETA en Legutiano


ETA asesina a un agente al volar la casa cuartel de la Guardia Civil de Legutiano
La capilla ardiente del guardia civil Juan Manuel Piñuel Villalón, asesinado por ETA esta madrugada en Legutiano-Villarreal de Álava, ha quedado abierta a las cinco menos cuarto de la tarde en la subdelegación del Gobierno en Álava. Pocos minutos después de la apertura ha llegado la viuda. Zapatero lo ha hecho sobre las 18.00 horas. Tras la salida de Zapatero, llegaron juntos Mariano Rajoy y María San Gil.
L D (Agencias) La viuda del guardia civil Juan Manuel Piñuel Villalón, asesinado esta madrugada por ETA, ha llegado a las cinco de la tarde a visitar la capilla ardiente que alberga los restos de su esposo en la subdelegación del Gobierno en Álava, situada en la calle Olaguibel de Vitoria, junto a la Comisaría de la Policía Nacional en la capital alavesa.
 
El féretro ha sido recibido en la subdelegación por el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba. Por deseo de la familia no se va a permitir el acceso de los medios de comunicación a la capilla.

En los primeros minutos de apertura han visitado la misma, entre otros, los dirigentes socialistas vascos Patxi López y Rodolfo Ares, la de IU Concepción Bilbao y el Ararteko o defensor del pueblo en la comunidad vasca, Iñigo Lamarca.
 
Una hora más tarde, alrededor de las seis de la tarde, ha llegado a la capilla ardiente el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que estaba acompañado por el presidente del Senado, Javier Rojo, y el diputado socialista Ramón Jauregui.
 
También la visitó el lehendakari, Juan José Ibarretxe, que llegó acompañado del consejero vasco de Interior, Javier Balza, el presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, el diputado general de Álava, Xabier Agirre, la presidenta del Parlamento vasco, Izaskun Bilbao, y el presidente del PNV de Álava, Iñaki Gerenabarrena, entre otros dirigentes del PNV.
  
En el momento en que Ibarretxe, acompañado de los dirigentes del PNV, abandonaban la capilla ardiente, llegó el presidente del PP, Mariano Rajoy, acompañado de la presidenta del PP vasco, María San Gil, y dirigentes del PP vasco, que permanecieron a escasos metros de la entrada a la Subdelegación del Gobierno de Álava hasta que los responsables del PNV abandonaron el lugar.
  
El lehendakari se introdujo en su vehículo oficial, momento en el que Iñigo Urkullu, Iñaki Gerenabarrena e Izaskun Bilbao saludaron al líder de la oposición.
  
Mariano Rajoy, y la líder del PP vasco, María San Gil, que se desplazaron en el mismo vehículo desde el aeropuerto de Foronda hasta la Subdelegación del Gobierno en Vitoria. Según relataron a Europa Press testigos presenciales, San Gil aguardó en el aeródromo al presidente de la oposición, acompañada de otros dirigentes del PP, entre ellos, el secretario general de la formación en la comunidad vasca, Carmelo Barrio, el portavoz de partido, Leopoldo Barreda, el presidente del PP de Álava, Alfonso Alonso, el presidente del PP de Vizcaya, Antonio Basagoiti o el secretario general de los populares alaveses, Iñaki Oyarzabal.
 
En su encuentro, días después de que María San Gil hiciera pública su intención de retirar su firma de la ponencia política del PP por "discrepancias sustanciales" y después de que esta mañana,la dirigente vasca expresara su "desconfianza" en la dirección nacional del partido, ambos se saludaron de forma cordial. Según los mismos medios, Rajoy –que viajó junto a la portavoz parlamentaria Soraya Sáenz de Santa María– y San Gil intercambiaron dos besos y unas primeras palabras y, posteriormente, se dirigieron al coche para enfilar a el camino hacia la capital alavesa, donde llegaron pasados unos diez minutos. Sobre las seis y media de la tarde, ambos entraron en la capilla ardiente para velar los restos mortales de Piñuel
 
También poco antes de las seis de la tarde se acercó a dar su apoyo a la familia de la víctima la hija de Isaías Carrasco, ex edil socialista de Mondragón asesinado por ETA el 7 de marzo de este año.

Temas

En España

    0
    comentarios