Tan cursi en español como en batúa
—aunque con este último te atascas—
tu verbo de farfollas y hojarascas
más que escandalizar, nos extenúa.
Porque tu sonsonete continúa:
en logomaquias híspidas te enfrascas,
y apelando a los vascos (y a las vascas)
tu ambición de poder se perpetúa.
Dado que el bien común te importa un bledo,
como el chulo del barrio te comportas,
blandiendo tu quimera euskopaleta.
Y para enfatizar, nos metes miedo:
o tragamos tu plan, o va a haber tortas.
Y esas no las das tú: las da la ETA.