Menú
GEES

Comunicado y bomba

El próximo hito en el proceso en el que se ha embarcado Rodríguez Zapatero serán las elecciones municipales de 2007. ETA da por descontado que podrá presentarse a los comicios, bien bajo su marca registrada –Batasuna–, bien bajo algún otro sucedáneo.

El comunicado emitido por ETA el fin de semana y el nuevo atentado con bomba perpetrado ayer por la banda terrorista han venido a confirmar los análisis realizados por el GEES en días pasados poniendo en evidencia la falta de base real de las expectativas generadas por el presidente del Gobierno sobre una inminente tregua de ETA.

El comunicado de ETA no sólo viene a reafirmar que la banda no tiene por el momento ninguna intención de abandonar su actividad criminal, sino que es un aviso al Gobierno de que la negociación emprendida no va, a juicio de los terroristas, por buen camino. ETA exige a Rodríguez Zapatero que pague el precio político por anticipado, como condición para abandonar el terrorismo. La bomba colocada posteriormente en Bilbao viene a rubricar su mensaje y aumenta la presión sobre los empresarios para que se sometan a la extorsión que ejerce la banda cada vez de forma más generalizada.

El Gobierno ha preferido dar por no recibido un comunicado que contradice totalmente el discurso de Zapatero. El presidente del Gobierno mantiene intactas sus expectativas del fin del terrorismo, aunque incide en lo largo que puede resultar el proceso. La estrategia del presidente es hacer como que ETA no existe, a pesar de que la banda está cada vez más presente.

Por otro lado, la feliz decisión del Tribunal Supremo de mantener en la cárcel a los asesinos más sanguinarios de ETA, en contra del criterio de la fiscalía, constituye una nueva contradicción entre un Gobierno empeñado en hacer gestos de distensión con los terroristas y un Estado de Derecho que continúa aplicando la ley de forma autónoma. Una contradicción que es difícilmente asumible por ETA.

El próximo hito en el proceso en el que se ha embarcado Rodríguez Zapatero serán las elecciones municipales de 2007. ETA da por descontado que podrá presentarse a los comicios, bien bajo su marca registrada –Batasuna–, bien bajo algún otro sucedáneo. Para ETA es vital volver a ocupar el poder local no sólo en términos políticos, sino también económicos. Los terroristas pueden renunciar hasta esa fecha a cometer nuevos asesinatos, manteniendo mientras todas las otras formas de criminalidad –extorsión, bombas, reclutamiento–. Por el contrario, si el Gobierno se planteara aplicar la vigente Ley de Partidos impidiendo a ETA concurrir a las elecciones, la banda terrorista puede responder con una sangrienta escalada sólo limitada por la debilidad que sigue padeciendo.

En España

    0
    comentarios