El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número dos de Marchena (Sevilla) ha llamado a declarar, en calidad de imputado, al alcalde electo de dicho municipio, el socialista Juan Antonio Zambrano. Un reportero de la radio televisión municipal le ha puesto una querella por supuestos delitos de lesiones, injurias y amenazas, todo ello derivado del trato que el periodista recibió durante la cobertura de la noche electoral del pasado 22 de mayo por parte del político socialista.
En concreto, y según un auto fechado el 2 de junio por la citada instancia judicial y recogido por Europa Press, el alcalde Zambrano, el reportero y denunciante V.C.L., y un testigo, están llamados a comparecer a partir de las 9:00 horas del próximo 7 de junio, siendo convocado el alcalde electo socialista en calidad de imputado.
Zambrano ya estaba imputado, también por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número dos de Marchena, en el marco de unas diligencias previas en las que la Fiscalía de Delitos Económicos había detectado "indicios" de un posible delito de "fraude de subvenciones" en torno al destino de una ayuda autonómica de aproximadamente 40.000 euros cosechada por el Consistorio de Marchena cuando estaba bajo su mando para la adquisición de equipos informáticos.
Los hechos relativos a la denuncia de V.C.L. acontecieron la noche del pasado 22 de mayo, día de las elecciones municipales y jornada en la que los socialistas se alzaron como fuerza más votada en Marchena al conseguir ocho concejales sobre un total de 17 miembros de la Corporación municipal. Cuando el denunciante, acompañado de un operador de cámara, cubría las celebraciones en la sede socialista y entrevistaban a Zambrano al ser el ganador de la liza electoral, éste regó con champán la cabeza del periodista en un "claro gesto de ofensa, burla y desprecio", según el denunciante. Tras ello, Zambrano secó con un pañuelo la cabeza del reportero, y criticó a Tele Marchena, al que acuso de manipulación, ya que sólo lo grabo a él "saliendo y entrando en el juzgado (...) y no a otras personas". "Han ido a dañarme a mi personalmente. Espero que estas palabras sean retransmitidas como lo estoy diciendo. Queremos una televisión transparente y democrática y aquellas personas que no crean en eso se tienen que marchar".